Cómo preparar los pancakes sin mantequilla

• Líquidos en acción: En un bol grande, rompe el huevo y añade la leche. Bate bien con una batidora manual o eléctrica, hasta obtener una mezcla homogénea.
  ¿Por qué? Mezclar primero los líquidos ayuda a disolver mejor el azúcar y repartir el aceite, creando una base uniforme para la masa.
  
  Dulzura y sabor: Añade el azúcar y la sal, mezclando de nuevo para disolver el azúcar.
  El aceite que aligera: Vierte el aceite de semillas de girasol en la mezcla y mezcla bien.
  ¿Por qué? El aceite, en lugar de la mantequilla, hace los pancakes más ligeros y los mantiene suaves sin pesar.
  
  Polvos mágicos: Tamiza la harina 00 y la levadura en polvo directamente en la mezcla líquida. ¡ES FUNDAMENTAL! Mezcla muy poco, pero con decisión, con una batidora manual o una espátula. Solo debes incorporar la harina a los ingredientes líquidos.
  No te preocupes si ves algún pequeño grumo: es normalísimo y de hecho, es el secreto para tener pancakes super esponjosos y no «gomosos». Mezclar demasiado desarrollaría el gluten y haría los pancakes duros.
  
  Consejo extra: Si te gusta, puedes añadir aquí también vainillina o ralladura de limón para un aroma delicioso.

• Calienta la sartén: Pon una sartén antiadherente al fuego medio. Es crucial que la sartén esté bien caliente, pero no humeante. Un buen indicador es alrededor de 200°C, pero puedes probarlo fácilmente.
  
  Engrasa ligeramente: Engrasa la sartén con un poquísimo aceite (puedes usar un papel de cocina empapado en aceite para distribuirlo uniformemente y eliminar el exceso).
  
  La prueba de la gota: Para asegurarte de que la temperatura es perfecta, vierte una pequeña cantidad de masa en la sartén. Si se forman burbujas de inmediato en la superficie y el pancake comienza a dorarse, ¡está lista!
  
  Vierte la masa: Con un cucharón, vierte una porción de masa en la sartén caliente. Ajusta la cantidad según el tamaño deseado de tus pancakes.
  
  Espera las burbujas: Deja cocinar sin tocar. Verás que en la superficie se formarán burbujas, que luego estallarán. ¡Este es el signo de que el pancake está listo para girarse!
  ¿Por qué? Las burbujas indican que la levadura está haciendo su trabajo y el pancake se está inflando bien.
  
  Gira y cocina: Cuando el pancake esté lleno de burbujas y los bordes estén ligeramente secos, gíralo con cuidado con una espátula y cocina durante otros 30-40 segundos del otro lado, hasta que esté dorado.
  
  Continúa cocinando: Procede de la misma manera con el resto de la masa. Si la sartén se calienta demasiado, baja un poco la llama para evitar que los siguientes pancakes se oscurezcan demasiado rápido.

• Sirve calientes: ¡Los pancakes están en su mejor momento recién hechos! Colócalos en torre sobre un plato.
  
  Libera tu imaginación: Sirve tus pancakes esponjosos sin mantequilla con tus toppings favoritos: Sirope de arce 🥞 (¡un clásico que nunca decepciona!)
  Crema de avellanas 🍫 (Nutella o tu crema untable favorita)
  Mermelada o miel 🍯
  Fruta fresca 🍓🍌 (fresas, arándanos, plátanos en rodajas…)
  Para un toque extra, añade nata montada o una espolvoreada de azúcar glas!

  

• Si quieres preparar unos pancakes deliciosos sin complicarte la vida, el método de poner todos los ingredientes en el bol y pasarlos por la batidora es sin duda una solución práctica y rápida sin ensuciar demasiados utensilios y puedes verlo AQUÍ–> Receta de pancakes rápidos. Sin embargo, si buscas una consistencia más ligera y aireada, prueba a separar los ingredientes secos de los líquidos y unirlos con delicadeza.
  Sea cual sea el método que elijas, el resultado será siempre irresistible: pancakes suaves, aromáticos y perfectos para un desayuno delicioso. ¡Ahora solo te queda probarlos y personalizarlos con tus toppings favoritos! 🍯🥞