Ensalada fría de tomates con lentejas y feta, receta muy fácil sin cocción.
Basta con ensamblar todos los ingredientes para un plato completo, fresco y delicioso.
He utilizado el tomate, después de vaciarlo y dejarlo escurrir, como recipiente para las lentejas y el feta.
Una vez cortado, todos los ingredientes se amalgamarán entre sí para un plato realmente delicioso.
Si deseáis llevar esta receta a la playa o al trabajo, mi consejo es cortar el tomate.
He utilizado uno para cada porción.
Aquí abajo os dejo algunas ideas frescas, ligeras y rápidas, para realizar ensaladas sin pasta, perfectas para disfrutar durante el verano.
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 10 Minutos
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 1
- Métodos de Cocción: Sin cocción
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Verano
Ingredientes
- 1 tomate rojo
- 4 cucharadas lentejas enlatadas
- 40 g ensalada mixta
- 50 g feta
- 1 pizca sal fina
- 2 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharada salsa de soja
Utensilios
- 1 Bol pequeño
- 1 Cuchillo
- 1 Cuchara
- 1 Colador
Pasos
Para preparar la Ensalada fría de tomates con lentejas y feta, lo primero que hacemos es escurrir muy bien las lentejas de su agua de conservación.
Lavamos, secamos y eliminamos la parte superior de un tomate.
Vaciamos el interior con una cuchara.
La pulpa podemos utilizarla para hacer una salsa o como condimento, después de triturarla.
Ponemos a escurrir también el tomate por unos minutos boca abajo.
Preparamos la ensalada lavándola y secándola con un paño limpio.
Si utilizáis la entera, limpiadla bien y enjuagadla varias veces bajo agua corriente fría, después de cortarla, hasta eliminar las impurezas.
En un bol creamos una base con la ensalada.
En el centro colocamos el tomate y comenzamos a rellenarlo.
Rellenamos el tomate con un poco de ensalada y añadimos dos cucharadas de lentejas.
Continuamos rellenando con el feta cortado en cubos y añadimos aceite y una pizca de sal.
Completamos con las dos cucharadas restantes de lentejas y, si queréis, con salsa de soja.
Dejamos reposar unos minutos antes de disfrutarla.
Si queréis conservar el feta, podéis ponerlo en un tarro hermético, sumergiéndolo en agua y sal.
De esta manera se conservará un par de días.

