No hay levadura ni tampoco mantequilla o aceite en esta tarta cremosa de ricotta y limón. Tampoco hay gluten, pero sin embargo es deliciosa. Tiene una consistencia que la hace parecerse mucho a una cheesecake, pero es decididamente más ligera. Los ingredientes son pocos y se combinan perfectamente entre sí creando una masa suave y delicada. En resumen, una tarta perfecta en cualquier momento del día. Y si sois muy golosos, acompañadla con una bola de helado y notaréis qué delicia.
Os recomiendo probar también:
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 8 personas
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes para la tarta cremosa de ricotta y limón
Dado que en esta receta se utiliza la cáscara del limón, es necesario que este sea orgánico no tratado. Os recuerdo que la piel de los limones comunes no es comestible.
- 500 g ricotta
- 3 huevos (medianos)
- 170 g azúcar
- 1 pizca cremor tártaro
- 60 g fécula de patata
- 1 sobre vainillina
- 1 limón (no tratado)
Herramientas
- 2 Cuencos
- Batidoras eléctricas
- 1 Espátula
- 1 Rallador para cítricos
- 1 Molde de diámetro de 22 cm
Preparación de la tarta cremosa de ricotta y limón
Separar las yemas de las claras.
Añadir a las claras una pizca de cremor tártaro y comenzar a montarlas a punto de nieve con las batidoras eléctricas. Cuando empiecen a volverse espumosas, añadir 30 g de azúcar con las batidoras en movimiento y trabajar hasta obtener un merengue blanco y firme. Reservar.
Verter el azúcar restante (140 g) en el cuenco de las yemas y batir con las batidoras eléctricas hasta que la mezcla esté clara y espumosa.
Luego añadir la fécula y la vainillina e incorporarlas con una espátula.
Ahora añadir la ricotta y mezclarla cuidadosamente con la mezcla.
Lavar bien el limón y extraer su cáscara con un rallador para cítricos, luego añadirla a la masa.
Finalmente añadir en varias etapas las claras montadas a punto de nieve incorporándolas con movimientos delicados de abajo hacia arriba para evitar que se desmonten.
Verter la masa obtenida en un molde de 22 cm de diámetro previamente forrado con papel de horno y nivelarla bien.
Cocer la tarta cremosa de ricotta y limón en horno ventilado precalentado a 180º durante 45 minutos.
Sacar del horno y dejar enfriar completamente.
Una vez fría, sacarla del molde, transferirla al plato de servir y espolvorearla con azúcar glas.
La tarta cremosa de ricotta y limón debe conservarse en el frigorífico y servirse fría. ¡Disfrutad! Paola
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