¡Tiramisú hoy para vosotros! El clásico de los clásicos, uno de los postres más buenos del mundo, ideal para servir al final de la comida (aunque yo lo comería a cualquier hora). Y no os oculto que ya tengo en mente muchas nuevas y deliciosas versiones para realizar para vosotros. ¡Y ahora, venga, a preparar este dulce espacial!
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 4 Horas
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 6
- Métodos de Cocción: Sin cocción
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 5 Huevos (asegúrate de que los huevos estén muy frescos)
- 500 g Mascarpone (si quieres el tiramisú más denso utiliza un mascarpone compacto, si lo prefieres más cremoso utiliza uno menos denso)
- 5 cucharadas Azúcar
- 300 g Savoiardi
- 4 tazas Café (usa café espresso sin azúcar)
- 1 c.s. Cacao amargo en polvo (para usar en la superficie)
Herramientas
- Batidora eléctrica como alternativa robot de cocina
- Bol
- Cuchara
- Fuente de vidrio o cuencos individuales
Preparación
Para empezar, separa cuidadosamente las yemas de las claras y colócalas en boles separados.
Con la ayuda de la batidora eléctrica (o del robot de cocina) monta las claras a punto de nieve firme y resérvalas.
Ahora monta bien las yemas con el azúcar hasta obtener una mezcla esponjosa y densa.
En un bol grande, pon el mascarpone y añade las yemas mezclando perfectamente todo, removiendo de abajo hacia arriba.
Ahora añade las claras montadas a punto de nieve en el bol con el mascarpone y las yemas, mezcla de abajo hacia arriba (esto para no deshacer las claras) hasta obtener una crema homogénea tanto en color como en consistencia.
Toma ahora 6 cuencos (o una fuente única), empapa rápidamente la mitad de las galletas en el café (que deberá ser amargo y bien frío) y colócalas en la base de los cuencos (o de la fuente).
Vierte la mitad de la mezcla (dejando la otra mitad) sobre las galletas empapadas en café, continúa con más galletas empapadas en café y termina llenando los cuencos (o la fuente grande) con la crema restante.
Cubre los cuencos (o la fuente grande) con film transparente y pon en el frigorífico al menos 4 horas antes de disfrutarlo (si lo preparas el día antes para el día siguiente, ¡será aún mejor!).
Antes de llevar a la mesa el tiramisú, quita el film y espolvorea cacao amargo en la superficie, ¡y buen provecho con el tiramisú!
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Ese toque extra…
Si quieres darle un toque extra al tiramisú puedes añadir 1 cucharada de crema de whisky a la crema de mascarpone.
