La tarta de almendras es un postre elegante y aromático, perfecto para quienes aman los sabores delicados pero intensos. Con su base quebradiza de masa y un relleno rico a base de almendras, esta tarta conquista desde el primer bocado gracias a su textura suave y su sabor envolvente. Es ideal para acompañar un té de la tarde, para terminar una cena con elegancia o simplemente para consentirse con algo especial. Si buscas otros dulces deliciosos prueba el plumcake de limón, la tarta crema de mermelada y almendras, la tarta de leche caliente o incluso la tarta de 12 cucharadas de manzana.
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OTRAS TARTAS
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 30 Minutos
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 2 tartas
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes para la preparación de la tarta de almendras
- 400 g harina 00
- 200 g mantequilla
- 120 g azúcar
- 2 huevos
- Media cáscara de limón (rallada)
- 1 pizca sal
- 500 g almendras
- 100 g amaretti
- 8 claras de huevo
- 200 g azúcar
- 1 pizca sal
- 1 cucharada ron
Herramientas
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- 2 Moldes 20×25
- Batidoras eléctricas
- Picadora
Pasos para la preparación de la tarta de almendras
Prepara la masa: en un bol coloca la mantequilla en cubos. Añade la harina y comienza a trabajarla con los dedos. Incorpora el azúcar, los huevos enteros, la sal, la ralladura de limón y trabaja hasta obtener una masa homogénea. Envuelve con film y refrigera 30 minutos.
Prepara el relleno: Pica finamente las almendras con los amaretti. Bate las claras a punto de nieve agregando poco a poco el azúcar. Incorpora delicadamente las almendras y amaretti con la sal y el ron (o alternativamente otra ralladura de cítricos).
Extiende la masa sobre papel de horno. Colócala en los dos moldes y pincha la base. Vierte la mezcla de almendras y claras en los dos moldes y hornea, en horno estático ya caliente, a 180° y cocina durante 40-45 minutos. Luego deja enfriar completamente, retira del molde y espolvorea con azúcar glas antes de servir.
Conservación
Puedes conservar dos o tres días bajo una campana de vidrio.
