El té frío de jengibre y limón es una bebida sin alcohol, refrescante y reconfortante, que no contiene gluten ni lactosa ni proteínas lácteas. Es perfecta para la temporada de verano, para combatir el calor; para prepararla, necesitaremos pocos ingredientes, todos fácilmente disponibles. El té frío de jengibre y limón es muy fácil, aromático, ideal como bebida para ofrecer a los invitados o para llevar al trabajo, a la playa; o para disfrutar después de la actividad física.
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 2 Horas
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 5
- Métodos de Cocción: Hervido
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Verano
Ingredientes
- 1 l agua
- 5 g jengibre fresco
- 1 cucharadita té negro (o 1 bolsita)
- miel u otro edulcorante
- 1 limón
Pasos
Vertemos el agua en un cazo grande. Añadimos la raíz de jengibre ya pelada y cortada en trozos y la cáscara de limón lavada (ten cuidado de tomar solo la parte amarilla).
Llevamos a ebullición y dejamos hervir durante 5 minutos, tapado, a fuego lento.
Pasados 5 minutos, apagamos el fuego y añadimos inmediatamente el té; cubrimos, dejamos en infusión durante 5/7 minutos máximo.
Para filtrar perfectamente la bebida de los pequeños residuos de hojas de té, podemos usar un pequeño infusor de acero (como el de la foto de abajo), lleno con la cantidad de té que necesitamos para esta preparación.
Pasado el tiempo de infusión, filtramos el té y las otras especias, endulzamos según nuestros gustos y transferimos la bebida a una botella de vidrio (sin taparla), dejándola a temperatura ambiente.
Después de un par de horas, transferimos la botella al frigorífico.
Disfrutamos de nuestro refrescante té de jengibre y limón bien frío, acompañado de rodajas de limón.
Si no te gusta el té negro, puedes usar otro de tu preferencia, personalmente prefiero el té negro en esta receta.
