Pasta fría con feta y calabacines un primer plato fácil y rápido de elaborar, perfecto para hacer con poquísimos pasos.
En verano me encanta experimentar con ideas de pasta fría, tratando siempre de no complicarme la vida con ingredientes difíciles de encontrar.
Esta vez literalmente hice esta receta con lo que tenía en el frigorífico, es decir, medio bloque de feta y un calabacín, algunos tomatitos junto con los rábanos para dar color y listo.
Ideal también para la cena, esta receta se prepara en muy poco tiempo y puedes también añadir aceitunas deshuesadas y hojas de albahaca para hacerla aún más fresca.
Aquí abajo os dejo otras ideas de pasta fría de las cuales tomar inspiración.
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 20 Minutos
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 4 personas
- Métodos de Cocción: Cocina
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Verano
Ingredientes
- 320 g trofie (o pasta corta a tu gusto)
- 125 g feta
- 1 calabacín (mediano)
- 4 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 14 g sal gruesa (para la pasta)
- 100 g tomates piccadilly
- 1 pizca sal fina
- 1 diente ajo
- 8 rábanos
Herramientas
- 1 Cacerola
- 1 Escurridor
- 1 Sartén
- 1 Bol
- 1 Cuchara
- 1 Cuchillo
- 1 Tabla de cortar
- 1 Trapo de cocina
- Papel absorbente
Pasos
Para hacer la Pasta fría con feta y calabacines, primero lava y seca el calabacín y elimina los extremos.
Córtalo finamente como en la foto.
Mientras tanto, cocina la pasta en abundante agua con sal, escúrrela y enfríala en un bol grande, con una cucharada de aceite.
En una sartén calienta el aceite con el diente de ajo sin la piel.
Añade los calabacines, agrega una pizca de sal y cocina durante 10 minutos a fuego bajo, girándolos a menudo para que se doren por todos lados.
Una vez que los calabacines estén listos, resérvalos.
Ahora toma la feta y sécala con un papel absorbente.
Córtala primero en bastones y luego en cubitos pequeños.
Añade los calabacines a la pasta y mezcla.
Con un trapo de cocina húmedo limpia los rábanos, córtalos en rodajas finas después de haber eliminado el tallo.
Lava y seca los tomatitos.
Córtalos en gajos.
Añade todos los ingredientes a la pasta y al calabacín en el bol.
Completa con la cucharada de aceite restante y mezcla bien.
Deja reposar por un instante.
También puedes preparar esta receta con antelación y conservarla en el frigorífico en un recipiente cerrado herméticamente, hasta el momento de llevarla a la mesa.

