La crema de calabaza con garbanzos es un primer plato delicioso que podríamos incluir entre los diversos platos reconfortantes de la temporada, una receta otoñal que nos ayuda a enfrentar mejor los días húmedos y algo fríos. La crema de calabaza con garbanzos es también un ejemplo típico de cómo se puede consumir un plato vegetariano (¡es más, vegano!) sin por ello renunciar al sabor y la satisfacción que la comida nos puede dar: aunque no soy vegetariana, intento variar a menudo mi menú aumentando, por ejemplo, el consumo de legumbres, que aportan fibra y, aunque en menor medida que la carne, también proteínas. La crema de calabaza con garbanzos se prepara muy fácilmente y en poco tiempo y si se presenta bien puede ser también un primer plato adecuado para ocasiones especiales. Puedes, por ejemplo, servirla con picatostes ligeramente fritos en aceite o simplemente tostados al horno o, para un primer plato aún más sustancioso, puedes añadir unos canelones, unos maltagliati u otra pasta corta.
Pueden interesarte también estas recetas:
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 4 personas
- Métodos de Cocción: Cocina
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno
Ingredientes para la crema de calabaza con garbanzos
- 500 g calabaza (sin cáscara ni semillas)
- 70 g puerro
- 400 g garbanzos en conserva
- 3 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 1 pizca sal
- c.s. pimienta
- 1 ramita romero
- c.s. caldo de verduras
Herramientas
- 1 Tabla de cortar
- 1 Cuchillo
- 1 Olla de 24 cm de diámetro con tapa
- 1 Batidora de mano
Cómo preparar la crema de calabaza con garbanzos
Para preparar la crema de calabaza con garbanzos comienza cortando la calabaza en gajos. Elimina la cáscara, las semillas y córtala en cubitos (1). Necesitarás unos 500 g de pulpa. Escurre los garbanzos y enjuágalos bien.
Lava bien el puerro y córtalo en rodajas no muy finas (2). En una cazuela sofríe ligeramente el puerro en el aceite (3), teniendo cuidado de no quemarlo.
Añade luego la calabaza (4) una pizca de sal y deja que se impregne de sabor durante un par de minutos. Añade luego un poco de caldo de verduras caliente (5).
Cubre la cazuela con una tapa (6) y cocina la crema de calabaza durante unos diez minutos a fuego medio.
Cuando la calabaza esté tierna, añade 3 o 4 cucharadas de garbanzos (7). Continúa cocinando durante 4 o 5 minutos, hasta que el agua se haya reducido (8).
Retira la cazuela del fuego y tritura con una batidora de mano (9), hasta obtener una mezcla homogénea. Si la crema de calabaza está demasiado espesa, puedes diluirla con un poco de agua o caldo.
Cuando hayas obtenido una crema de calabaza lisa y homogénea (10), vuelve a poner la cazuela al fuego, añade el resto de los garbanzos (11) y unas hojitas de romero.
Ajusta de sal, pimienta, y cocina la crema de calabaza durante 4-5 minutos más, removiéndola a menudo, hasta que espese (12). Apaga el fuego.
Sirve la crema de calabaza con garbanzos de inmediato, adornada con un poco de pimienta, una ramita de romero y acompañada de picatostes.
Cómo conservar la crema de calabaza
Si sobra, puedes conservar la crema de calabaza con garbanzos en un frasco de vidrio en el frigorífico durante 3 o 4 días.
Consejos y variantes
La densidad de la crema de calabaza depende tanto de la cantidad de caldo añadido durante la cocción, como del tipo de calabaza utilizada: variedades como la Delica o la mantovana, por ejemplo, te permiten preparar una sopa más densa y cremosa.
En lugar del puerro puedes usar media cebolla dorada, o una chalota.
Si estás buscando otras formas sabrosas de cocinar la calabaza aquí encuentras muchas recetas!
