Brioche con tuppo con masa madre facilísimas, porque anoche tenía mi hermosa masa madre activa y fermentada, pero no tenía ganas de masas saladas, sino que quería un buen desayuno para hoy. Buscando en internet, todas las recetas eran larguísimas, con tiempos de fermentación improbables que casi me hacían querer dejar a un lado mi hermosa criatura para retomarla en otros días, pero como de costumbre, mi cabeza es más dura que el mármol y cuando quiero algo, no hay forma de hacerme cambiar de opinión. Así que, armada solo con mi deseo y mi modesta experiencia con la masa madre, tomé la amasadora, decidí los ingredientes a utilizar y comencé a amasar. Amasando la noche antes de irme a dormir, dejando la masa a temperatura ambiente, me levanté al amanecer para darle forma y volví a la cama, así pude hornear al despertar y voilà, el desayuno estaba servido.
Para quienes aman amasar en casa y tener desayunos siempre diferentes, dejo otras recetas de fermentación instantánea y larga.
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 8 Horas
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 10 brioches
- Métodos de Cocción: Fornello
- Cocina: Italiana
- Energía 324,60 (Kcal)
- Carbohidratos 50,58 (g) de los cuales azúcares 12,95 (g)
- Proteínas 8,40 (g)
- Grasa 10,52 (g) de los cuales saturados 6,30 (g)de los cuales insaturados 3,89 (g)
- Fibras 0,91 (g)
- Sodio 119,67 (mg)
Valores indicativos para una ración de 105 g procesada de forma automatizada a partir de la información nutricional disponible en las bases de datos CREA* y FoodData Central**. No se trata de consejos alimentarios y/o nutricionales.
* CREATES Centro de Investigación sobre Alimentación y Nutrición: https://www.crea.gov.it/alimenti-e-nutrizione https://www.alimentinutrizione.it ** Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, Servicio de Investigación Agrícola. FoodData Central, 2019. https://fdc.nal.usda.gov
Ingredientes
- 150 g harina Manitoba
- 250 g harina 00
- 220 g masa madre (activa)
- 100 g azúcar
- 1 cucharada miel
- 100 ml leche (tibia)
- 2 huevos
- 1 yema (para pincelar la superficie)
- c.s. cáscara de limón
- 100 g mantequilla (blanda)
Herramientas
Para amasar, os recomiendo usar la amasadora, pero alternativamente, y con un poco de energía, podéis amasar a mano.
- 1 Amasadora
- 1 Bandeja de horno
Preparación
Amasa todos los ingredientes a velocidad moderada, añadiéndolos uno a uno en el orden descrito y dejando la mantequilla para el final, que debe añadirse en varias veces para que la masa no se desliga. Obtendrás una masa suave y un poco pegajosa que transferirás a un bol ligeramente aceitado para que leve. Para mover bien la masa, ayúdate con las manos engrasadas con aceite y una espátula.
La masa debe doblar su tamaño; si no encuentras la masa levada y esponjosa, es inútil que procedas: espera el doblado. Recuerda que lo bonito de la fermentación natural es esto: no eres tú quien decide los tiempos, sino que hay que respetar los tiempos de la masa.
Yo amasé sobre las 20:00, luego tapé el bol con una tapa y lo puse a descansar en el horno apagado para evitar cambios de temperatura. Alrededor de las 4:00 (no te asustes, estarás despierto solo unos minutos, luego volverás a descansar y te despertarás con un excelente desayuno que te espera) encontré la masa así.
En este punto, espolvorea una superficie de trabajo, porque te recuerdo que la masa es blanda, espolvoréala también por encima y, sin tocarla mucho, córtala en tantas piezas como brioches quieras hacer (yo 9 piezas más una décima para dividir para hacer el «tuppo»). Para cortar, utiliza un cuchillo o una espátula, así no tocas mucho la masa y no será necesario añadir más harina.
Para hacer las brioches, gira las piezas sobre sí mismas como para enrollar y crea las «bolas» y bolitas para superponer. Para evitar que el tuppo se escape (como me pasó a mí, lo veréis en las fotos), puedes pegarlo con un poco de clara de huevo. Coloca tus brioches en una bandeja de horno cubierta con papel de horno, un poco separadas entre sí porque aumentan bastante de tamaño. Pincélalas con un poco de aceite de semillas para volvérlas a dejar levar, cubiertas con una hoja de plástico, y evitar que durante la fermentación esta hoja se pegue a las brioches.
Vuelve a poner tus brioches cubiertas en el horno apagado y ¡vuelve a dormir!
Después de unas tres horas, las brioches habían crecido como ves en la foto y estaban listas para ser horneadas.
Enciende el horno y, cuando haya alcanzado la temperatura de 180°, hornéalas durante unos 20 minutos; de todas formas, verifica el dorado de la superficie. Antes de hornear, pinta la superficie con la yema batida.
Las brioches están listas cuando están doradas, como ves en la foto. Me gustaría que pudieras oler el aroma que se desprendió en casa, pero no es posible.
El interior de estas brioches es suavísimo y la superficie se mantiene crujiente. Son excelentes para ser consumidas solas o rellenas con helado y cremas.
NOTAS
Las brioches con tuppo se consumen principalmente en verano porque son perfectas rellenas con helado y granizados, pero os garantizo que son perfectas todo el año para desayunos y meriendas. Excelentes solas y muy atractivas rellenas con cremas o mermelada.
Se mantienen suaves durante un par de días, pero mi consejo si no las consumes todas es congelarlas y descongelarlas a temperatura ambiente. Bastarán un par de horas para que vuelvan a estar perfectas.
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