La tarta con crema de limón al agua es un dulce aromático y delicioso, que conquista a todos al primer bocado.
La particularidad de esta tarta es que es cerrada: está formada por dos discos de masa quebrada que encierran un relleno cremoso y suave.
Este dulce es de los más buenos que he realizado y probado. La crema de limón es muy delicada y está hecha sin huevos y sin lactosa.
¡Perfecta para cualquier ocasión, con esta receta sorprenderás a todos en la mesa!
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 30 Minutos
- Porciones: 6 Personas
- Métodos de Cocción: Horno, Hornillo
Ingredientes
- 300 g harina 00
- 80 g azúcar
- 120 g mantequilla
- 2 yemas
- 1 huevo
- 1 cucharadita extracto de vainilla
- 1 sobre levadura en polvo para dulces
- 100 ml zumo de limón
- 100 g azúcar
- 50 g almidón de maíz
- 250 ml agua
Herramientas
- Molde para tarta
- Rodillo
- Cazo
- Batidor manual
Pasos
Para la realización de la tarta con crema de limón al agua, primero hacer la crema.
En un cazo con bordes altos, verter el azúcar y el almidón de maíz. Mezclar bien con la ayuda de un batidor.
Mientras se mezcla, añadir poco a poco el zumo de limón y el agua. Mezclar para amalgamar todo y obtener una mezcla homogénea.
Poner el cazo al fuego y, continuando a mezclar, hacer que la crema espese. Tomará unos 5 minutos.
Cuando la crema esté densa, verterla en un bol y cubrir con film transparente en contacto con la superficie y dejar enfriar.
Hacer la masa quebrada. En un bol, o en la batidora, verter la harina, la levadura y la mantequilla fría cortada en trozos. Comenzar a amasar hasta obtener una mezcla de aspecto arenoso.
A continuación, añadir el azúcar y las yemas; seguir amasando y añadir el huevo y el extracto de vainilla.
Amasar para obtener una mezcla homogénea y luego transferir la masa a la superficie de trabajo ligeramente enharinada.
Trabajar con las manos brevemente, para que los ingredientes se amalgamen bien entre sí y obtener un panecillo homogéneo.
Cubrir el panecillo de masa quebrada con film transparente y dejarlo reposar en la nevera durante 30 minutos.
Pasado el tiempo, retomar la masa quebrada, estirarla con un rodillo sobre la superficie ligeramente enharinada y obtener un disco de unos medio centímetro de grosor.
Colocar la masa estirada en un molde de 22 cm de diámetro, verter la crema pastelera de limón nivelándola con el dorso de una cuchara.
Estirar con el rodillo la masa restante sobre una hoja de papel de horno enharinada, para obtener otro disco.
Voltear el disco sobre el molde con la base y el relleno, eliminar con un cuchillo el exceso de masa en los bordes.
Cocinar la tarta en el horno (yo ventilado) ya caliente a 180°C durante 25 minutos, o hasta dorar.
Desmoldar y dejar enfriar al menos un par de horas. Finalmente espolvorear la superficie con un poco de azúcar glas y servir. ¡Disfruta!
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