Preparación

• Para preparar los profiteroles de tiramisú, derretir la mantequilla al baño maría y luego verterla en una cacerola, agregar el agua y una pizca de sal. Poner a fuego lento y llevar a ebullición. Agregar la harina y mezclar todo hasta que la mezcla se despegue de los lados de la cacerola, asegurándose de que no se formen grumos. Retirar del fuego y dejar enfriar a temperatura ambiente.

• Luego agregar los huevos, uno a uno, hasta que se absorba el anterior. Mezclar hasta obtener una mezcla homogénea y cremosa.

• Colocar la pasta choux en una manga pastelera con boquilla de estrella y, en una bandeja de horno ligeramente engrasada, formar los bignés, haciendo montoncitos de pasta del tamaño de una nuez, separándolos entre sí.

• Calentar el horno a 250°C, hornear y bajar a 180°C, cocinar durante 15-20 minutos. Luego bajar a 120°C y cocinar otros 20 minutos, sin abrir la puerta del horno.

• Una vez finalizada la cocción dejar los bignés en el horno apagado con la puerta entreabierta durante 10 minutos, luego sacarlos y dejarlos enfriar completamente.

• En un cazo llevar la leche a ebullición. Mientras tanto, en un bol, batir las yemas con el azúcar y añadir, poco a poco, la harina tamizada. Mezclar hasta obtener una mezcla homogénea.

• Luego agregar al compuesto de huevos la leche hirviendo, vertiéndola poco a poco. Mezclar con un batidor y poner la mezcla obtenida al fuego y llevar a ebullición, removiendo hasta que la crema espese.

• Transferir la crema a un bol de vidrio, cubrir con film alimentario en contacto con la superficie y dejar enfriar.

• Una vez que la crema esté fría, sacar 150 gramos y reservarlos (servirán para la cobertura).

• Montar la nata y agregarla a la crema, mezclando con un movimiento de abajo hacia arriba, hasta obtener una crema compacta y espumosa. Agregar también el café espresso frío y mezclar todo hasta obtener una crema homogénea.

• En un bol combinar los 150 gramos de crema pastelera, reservada anteriormente, con el mascarpone hasta obtener una mezcla cremosa. Montar la nata y unirla a la crema de mascarpone con un movimiento de abajo hacia arriba.

• Rellenar los bignés con la crema de café y colocarlos en una bandeja. Sumergir los bignés boca abajo, uno por uno, en la crema de mascarpone.

• Una vez glaseados los bignés proceder al montaje del postre: disponer los bignés en un plato de servir, colocándolos uno sobre otro formando una pirámide. Espolvorear con cacao amargo y guardar los profiteroles en el frigorífico hasta el momento de servir. ¡Disfruta!

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