La galleta helada de nata y chocolate es perfecta para el verano y para disfrutar cuando se tiene antojo de algo fresco. Fácil de realizar, esta galleta helada no tiene nada que envidiar a la que se compra en el supermercado, es más, resulta más genuina y es muy satisfactorio poder realizarla en casa. ¡Mi novio me dio la nota: 10 y matrícula de honor! Una vez probada esta galleta helada de nata y chocolate, ¡no verás la hora de volver a hacerla!
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- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Tiempo de cocción: 5 Minutos
- Porciones: 8Piezas
- Cocina: Italiana
Ingredientes
- 250 g Harina 00
- 125 g Mantequilla
- 100 g Azúcar glas
- 15 g Cacao amargo en polvo
- 62 g Huevos
- 12 g Yemas
- 3 g Levadura en polvo para postres
- 200 ml Nata fresca líquida
- c.n. Chispas de chocolate
- 2 cucharadas crema de avellanas
Herramientas
- Batidora
- Cortapastas
Preparación
Para realizar la galleta helada de nata y chocolate, en un bol, o en la batidora, verter la mantequilla blanda cortada en trozos, luego añadir el azúcar glas y mezclar todo con las varillas o con una cuchara de madera.
Después añadir los huevos enteros uno a uno, esperando que el anterior se haya incorporado bien, y finalmente añadir la yema. Continuar mezclando hasta la completa absorción de los ingredientes.
Añadir la harina, el cacao amargo y la levadura, trabajar hasta obtener una masa consistente, también con la ayuda de las manos. Formar una bola y dejarla reposar en el frigorífico al menos tres horas cubierta con film transparente.
Sacar la masa del frigorífico y extenderla a un grosor de unos 2 mm, con un cortador de galletas (diámetro 8 cm) sacar dieciséis discos y colocarlos en la bandeja del horno forrada con papel de horno. Pinchar la superficie de las galletas con un tenedor.
Cocer en el horno precalentado a 250° durante 5 minutos. Una vez listos, sacarlos del horno y colocarlos sobre una rejilla para que se enfríen.
En un bol montar la nata y añadir las chispas de chocolate al gusto. Dividir la nata en dos boles y en uno incorporar la crema de avellanas ligeramente derretida al baño maría.
En este punto se podrá proceder a la composición de las galletas heladas: en ocho discos de galleta añadir en una mitad una cucharada de nata y en la otra mitad una cucharada de nata al chocolate.
Con la ayuda de una espátula hacer que ambas cremas se adhieran a la superficie, creando una capa de aproximadamente un centímetro. Cerrar las galletas con las otras mitades de los discos de galleta.
Dejar reposar las galletas heladas en el congelador durante al menos un par de horas. Luego disfrutarlas cuando se desee. ¡Disfruta!
Nota: como no consumimos todas las galletas el día siguiente de su elaboración, las conservé en el congelador dentro de una bolsa de plástico, así que se pueden sacar y disfrutar cuando se desee.
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Para su elaboración me inspiré en una receta vista en Ho voglia di dolce.
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