Siempre estaba acostumbrada a comprar la bechamel en el supermercado, pero desde que aprendí a prepararla en casa, me lleva realmente poquísimos minutos, ahorro dinero y el sabor es decididamente mejor.
La uso a menudo para condimentar pasta al horno, lasañas y canelones, pero también para la carne.
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 5 Minutos
- Porciones: 4
- Métodos de Cocción: Cocina
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
- Energía 216,31 (Kcal)
- Carbohidratos 15,45 (g) de los cuales azúcares 6,15 (g)
- Proteínas 5,44 (g)
- Grasa 15,26 (g) de los cuales saturados 9,73 (g)de los cuales insaturados 5,51 (g)
- Fibras 1,69 (g)
- Sodio 98,19 (mg)
Valores indicativos para una ración de 150 g procesada de forma automatizada a partir de la información nutricional disponible en las bases de datos CREA* y FoodData Central**. No se trata de consejos alimentarios y/o nutricionales.
* CREATES Centro de Investigación sobre Alimentación y Nutrición: https://www.crea.gov.it/alimenti-e-nutrizione https://www.alimentinutrizione.it ** Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, Servicio de Investigación Agrícola. FoodData Central, 2019. https://fdc.nal.usda.gov
Ingredientes
- 500 ml leche
- 50 g mantequilla
- 50 g harina
- 1 pizca sal
- 1 pizca nuez moscada
Herramientas
- Batidor
- 2 Cazuelas
Pasos
Para preparar la bechamel, verted la leche en una cacerola, añadid una pizca de sal y la nuez moscada, luego calentarla. En una segunda cacerola, poned la mantequilla y dejad que se derrita a fuego lento. Tan pronto como se derrita, añadid la harina y mezclad vigorosamente con un batidor de mano para evitar la formación de grumos. Debéis obtener una mezcla dorada. En este punto, verted la leche poco a poco mientras continuáis mezclando. Después de unos minutos, la bechamel comenzará a espesarse, entonces apagad el fuego. Transferid la bechamel a un bol para detener la cocción y utilizadla para vuestros platos.
Conservación
Si no la usáis de inmediato, dejad que la bechamel se enfríe completamente, luego cubrid el bol con film transparente y guardadlo en la nevera durante 2 días.
Para devolverla a su estado liso y cremoso, debéis dejarla a temperatura ambiente durante unos diez minutos y luego batirla con batidoras eléctricas durante unos segundos.
Alternativamente, podéis congelar en el congelador por un máximo de 30 días.
Para usarla, simplemente sacadla del congelador con unas horas de anticipación y dejadla descongelar en la nevera o a temperatura ambiente. Si tiene una consistencia más líquida, en este caso, podéis calentarla en una cacerola para que se espese nuevamente, pero solo después de haberla descongelado completamente.

