Pasos

• Tritura el chocolate y resérvalo.
  
  Primero preparamos la crema pastelera que debe enfriarse (prepararemos una sola dosis que servirá tanto para la masa como para el relleno).
  
  Pon la leche con la vaina de vainilla al fuego y caliéntala (no debe hervir, solo calentarse).
  
  En una cacerola bate los huevos con un batidor.
  
  Mezcla bien el azúcar con la harina y añádelos poco a poco a los huevos sin dejar de mezclar con el batidor, mezcla bien hasta que la mezcla esté suave y homogénea.
  
  Elimina la vainilla de la leche y añádela poco a poco a la crema de huevos, sin dejar de mezclar con el batidor.
  
  Cuando la mezcla esté homogénea, transfiérela al fuego con la llama muy baja (yo también uso el difusor de llama) y cocina mezclando siempre con el batidor hasta que la crema espese y se vuelva cremosa.
  
  Saca 250 g de la crema y resérvala en un tazón cubierto con film en contacto.
  
  Añade el chocolate triturado a la crema restante y mezcla bien hasta que se derrita y la crema esté homogénea.
  
  Cubre también esta crema con film en contacto y resérvala.

• Cuando la crema esté fría, preparamos la masa choux.

  
  Pon el agua con la mantequilla y la pizca de sal al fuego.

  
  Cuando se derrita la mantequilla, añade la harina de golpe, mezcla con una cuchara de madera hasta que se despegue de los bordes de la olla y se forme una bola, en este punto sigue mezclando y déjala secar a fuego muy bajo durante unos 5 minutos.

  
  Transfiere la mezcla a la batidora de pie o usa una batidora eléctrica y bátela para eliminar posibles grumos.

  
  Con la masa tibia y continuando el trabajo, añade un huevo a la vez, cuando el primer huevo se haya incorporado a la masa, añade otro.

  
  Cuando todos los huevos se hayan incorporado, añade también la vainillina y amasar otros 8 minutos siempre con la batidora de pie con el gancho de mariposa o con el batidor.

  
  Añade los 250 g de la crema pastelera blanca que habías reservado y la ralladura de limón, sigue trabajando la mezcla por otros 10 minutos.

• Enciende el horno a 170° ventilado.

  
  Forra una bandeja grande con papel de horno y con la manga pastelera (como las zeppole de San Giuseppe) forma rosquillas de 9 cm de diámetro (haciendo dos vueltas de masa una sobre otra).

  
  Decora las rosquillas con granillo de azúcar y hornéalas en el horno ventilado a 170° por 35 minutos, los ‘via col vento’ deben estar bien dorados, no abras el horno antes de los 30 minutos.

  
  Cuando estén bien cocidos, apaga el horno y deja las rosquillas dentro 5 minutos con la puerta un poco abierta, luego sácalas y deja que se enfríen.

• Cuando estén frías podemos rellenar nuestros ‘via col vento’ con la ayuda de una manga pastelera con boquilla de estrella con una bonita crema de chocolate y decorarlos al gusto, yo he añadido algunas bayas, pero también son perfectas las gotas de chocolate blanco o lo que prefieras.

  Espolvorea ligeramente con azúcar glas.

  
  Los ‘via col vento’ al chocolate están listos para ser disfrutados.

  
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