Preparación del muñeco de nieve de queso

• En un bol grande, coloca el queso para untar.
  Añade tres cucharadas de grana rallado, una cucharadita de orégano, una cucharadita de perejil picado y una cucharadita de cebollino.
  Agrega una pizca de sal, algo de pimienta y mezcla bien, hasta obtener una mezcla homogénea.

• Pon un trozo de film transparente en la mesa de trabajo.
  Vierte dos tercios de la mezcla preparada y, ayudándote con el film, dale forma de bola.
  Pon otro trozo de film, añade el resto de la mezcla y forma otra bola más pequeña, siempre ayudándote con el film.
  Deja reposar las bolas de queso así creadas, bien cerradas en el film, en el frigorífico hasta diez minutos antes de servirlas, y en cualquier caso por al menos media hora.

• Poco antes de servir, dispón abundante grana rallado en un plato.
  Pasa la bola más grande, liberada del film, cubriéndola por todos lados y luego colócala en un plato de servir.
  Pasa también la bola más pequeña por el queso rallado.
  Inserta un palito salado, o un palillo, en el centro de la bola más grande y coloca la bola más pequeña encima de la grande: el palito o el palillo actuarán como eje (el palito se debe usar si el muñeco se sirve inmediatamente, mientras que es mejor usar el palillo si el servicio no es inmediato porque el palito con el tiempo se humedece y se ablanda).

• Parte por la mitad otro palito salado y úsalo para los brazos del muñeco.
  Dispón dos granos de pimienta para formar los ojos, un trozo de zanahoria para la nariz y otros granos de pimienta para los botones.
  Dispón las galletas saladas alrededor del muñeco en el plato de servir.
  Toma la rebanada de salame y con las tijeras haz primero un corte desde el borde hacia el centro de uno o dos centímetros y luego corta paralelamente al borde hasta obtener una larga tira: colócala como bufanda para tu muñeco de nieve de queso.
  Sirve inmediatamente.

  Chez Bibia