La tarta rústica aperitivo es un verdadero comodín en la cocina: una masa suave y sencillísima, lista en pocos minutos en un bol y sin levadura. Dentro encierra una mezcla deliciosa de embutidos, provolone y aceitunas verdes, que podéis variar según lo que tengáis en la nevera… ideal para recuperar pequeños restos y reducir el desperdicio. El resultado es una tarta salada suave y sabrosa, que se corta fácilmente en cubitos y es apta para mil ocasiones: desde el aperitivo con amigos hasta un buffet de entrantes, desde fiestas de cumpleaños hasta el brunch del domingo!
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- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 4Personas
- Métodos de Cocción: Horno
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 200 g harina 00
- 2 huevos
- 125 g leche
- 45 g aceite de semillas
- 10 g levadura instantánea para preparaciones saladas
- 1 cuchara Grana Padano rallado (a gusto)
- 70 g embutidos variados (speck, panceta, jamón cocido, salame etc.)
- 70 g provolone
- 35 g aceitunas verdes
- sal
Herramientas
- Molde para tarta rectangular 18×25
- Papel de horno
- Bol
- Tabla de cortar
- Batidor de mano
Preparación
Cortad el provolone en cubitos. Escurrid bien las aceitunas y cortadlas en rodajas.
Cortad en pequeños cubitos los embutidos: podéis utilizar jamón cocido, salame, speck, panceta ahumada… son buenos los restos que tengáis en la nevera.
Ahora preparad la masa: romped los huevos en un bol, añadid una pizca de sal, la leche y el aceite de semillas. Batid durante unos segundos con el batidor.
Añadid la harina tamizada junto con la levadura (y el grana si lo preferís). Incorporad poco a poco, siempre mezclando con el batidor.
Obtendréis una masa suave y pegajosa.
Incorporad las aceitunas, el queso y los embutidos (1), a gusto, podéis añadir también hierbas aromáticas secas. Distribuid con una espátula.
Forrad el molde con el papel de horno, luego verted la masa y alisad (2).
Colocad la tarta salada en el horno estático a 180° (o 170-175° ventilado) y hornead durante unos 30 minutos, o hasta que esté seca por dentro (comprobad con un palillo para aseguraros).
Al final, sacadla del horno y dejadla enfriar un poco (3).
La tarta rústica aperitivo está lista, cortadla en cuadrados y servidla tibia o a temperatura ambiente… ¡buen provecho!
Consejos y notas
Puedes personalizar el relleno a gusto, con los embutidos y quesos que tengas a disposición. También puedes añadir tomates secos o verduras salteadas.
Puedes utilizar harina 0 o tipo 1 en lugar de la 00. Puedes usar aceite de oliva virgen extra en lugar del de semillas.
FAQ (Preguntas y Respuestas)
¿Cómo se conserva la tarta rústica aperitivo?
Si te sobra, puedes conservarla en la nevera durante un par de días, en un recipiente cerrado. Alternativamente, puedes congelarla y luego recalentarla en el horno o en la freidora de aire.
