El panforte es un dulce navideño rico en sabor y energía y sus orígenes se remontan a la Edad Media. Es un dulce típico de la Toscana, en particular de Siena, preparado con mucha fruta seca, originalmente cáscaras de naranja, cidra y melón, así como almendras y especias.
Como suele suceder con las recetas típicas, existen algunas variaciones, dependiendo de la zona y las costumbres. Hoy en día también encontramos el panforte preparado sin frutas confitadas y con otras frutas secas, por ejemplo, higos, como en mi caso.
El procedimiento es bastante simple, a la fruta seca se le añaden harina y especias y una mezcla de miel y azúcar caliente. Se mezcla todo bien en un bol, se transfiere a un molde y se hornea. El único paso algo complicado es ese precisamente, ya que los ingredientes deben mezclarse, pero la mezcla no debe trabajarse demasiado, ya que se endurece bastante rápido y por lo tanto es más difícil extenderla en el molde. ¡Pero veréis que si seguís la receta, no tendréis dificultades!
Si os gustan los dulces navideños, probad también estas recetas mías:
- Dificultad: Media
- Tiempo de preparación: 35 Minutos
- Porciones: 1 molde de 22 cm de diámetro
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Navidad
Ingredientes
- 200 g almendras
- 350 g higos secos
- 250 g nueces
- 170 g harina 0
- 5 g canela en polvo
- 1 g clavos de olor molidos
- 2 g nuez moscada (rallada)
- 2 g pimienta
- 180 g miel
- 180 g azúcar
- 25 g agua
- c.s. azúcar glas
Pasos
Para preparar el panforte, precalienta el horno a 170 grados y forra un molde (22 cm de diámetro) con papel de horno. Si solo forras el fondo del molde con papel de horno, engrasa los bordes con un poco de aceite de semillas, para que sea más fácil desmoldar el panforte después de la cocción.
Distribuye las almendras en una bandeja forrada con papel de horno y tuéstalas durante 8-10 minutos en el horno.
Mientras tanto, corta los higos secos en cubitos pequeños y colócalos en un bol grande junto con las nueces, la harina y las especias (canela, clavos de olor, nuez moscada y pimienta). Mezcla bien todo. Cuando las almendras estén tostadas, agrégalas también y mezcla bien nuevamente.
En un cazo, pon el agua, el azúcar y la miel. Calienta a fuego medio, revolviendo, hasta que el azúcar se haya disuelto y la mezcla comience a hervir. Viértelo en el bol con los demás ingredientes y mezcla rápidamente, hasta que no queden rastros visibles de harina. Intenta hacer este paso lo más rápido posible, ya que cuanto más se mezcla, más se compacta y será más difícil extenderlo en el molde.
Transfiere la mezcla al molde, moja tus manos y aplástala bien, hasta llenar todo el molde de manera uniforme. Si tienes un rodillo pequeño, al final también puedes colocar un papel de horno sobre la mezcla y pasar el rodillo por encima para compactar todo aún más y hacer la superficie uniforme.
Espolvorea la superficie con azúcar glas y hornea a 170 grados durante 30-35 minutos, hasta que la superficie esté seca y uniforme.
Saca del horno, deja reposar durante 5 minutos y luego desmolda el panforte de inmediato. No lo dejes enfriar completamente en el molde, de lo contrario será más difícil desmoldarlo.
Luego deja enfriar completamente sobre una rejilla, espolvorea nuevamente con abundante azúcar glas y sirve cortado en cuñas o cubos.
Sugerencias
El panforte es uno de esos dulces que se conservan durante mucho tiempo, incluso 4 semanas, bien envuelto en papel de horno.
