La cheesecake en vaso es un postre individual fresco y delicioso. Los albaricoques añaden un toque de acidez que la hace realmente irresistible. Para la base he elegido galletas de cereales, pero obviamente podéis utilizar las que más os gusten. Para la crema, además del clásico queso crema, fundamental para preparar una auténtica cheesecake, he añadido nata agria y un poco de nata líquida fresca, para obtener una crema suave y ligera.
En cuanto a los albaricoques, he usado mis favoritos, es decir, los albaricoques del Valle Venosta, variedad Vinschger Marille, que tienen un sabor ácido y un aroma muy intenso. Los he salteado en un caramelo desglasado con limón, una combinación perfecta para un postre realmente fresco y jugoso, que se puede servir tranquilamente incluso después de una comida abundante.
Si os gustan los albaricoques, probad también estas recetas mías:
- Dificultad: Fácil
- Tiempo de reposo: 1 Hora
- Tiempo de preparación: 25 Minutos
- Porciones: 6 vasos
- Métodos de Cocción: Fogón
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Verano
Ingredientes
- 150 g galletas (de cereales)
- 20 g mantequilla
- 250 g queso crema
- 200 g nata agria
- 70 g azúcar
- 1 limón (no tratado – cáscara)
- 100 g nata líquida fresca
- 400 g albaricoques (Val Venosta – Vinschger Marille)
- 75 g azúcar
- 30 g mantequilla
- 1/2 limón (zumo)
Pasos
Para preparar la cheesecake en vaso con albaricoques, desmenuzad las galletas con las manos y ponedlas en un bol. Si queréis, también podéis ponerlas en la batidora y triturarlas en polvo; yo prefiero desmenuzarlas con las manos, para que queden algunos trocitos un poco más grandes, que dan un toque de crujiente extra a la cheesecake. Derretid la mantequilla, vertedla sobre las galletas desmenuzadas y mezclad bien para amalgamar todo. Repartid la mezcla en el fondo de 6 vasos (o cuencos) y guardad en la nevera.
Mientras tanto, preparad la crema. Poned el queso crema en un bol junto con la nata agria y el azúcar. Batid con las varillas durante un par de minutos, hasta obtener una mezcla cremosa y homogénea. Añadid la cáscara rallada del limón previamente lavado. Finalmente, verted la nata líquida fresca y batid todo con las varillas hasta obtener una crema suave y cremosa, con una consistencia similar a la nata montada.
Distribuid la crema en los vasos, sobre la base de galletas, y guardad en la nevera aproximadamente una hora.
Mientras tanto, lavad y deshuesad los albaricoques y cortadlos en gajos.
Poned el azúcar en una sartén y dejadlo caramelizar a fuego bajo. Cuando el azúcar esté caramelizado, añadid los albaricoques, la mantequilla y el zumo de limón. Cocinad durante un par de minutos, mezclando. Inicialmente, el caramelo se solidificará, pero continuando la cocción y mezclando, se disolverá nuevamente. Retirad del fuego y dejad enfriar los albaricoques.
Una vez fríos, distribuid los albaricoques junto con su sirope en los vasos, sobre la crema de queso crema, y servid vuestras cheesecakes.
