Pasos

• Para preparar los raviolis de patatas rellenos de manzanas y queso, lava bien las patatas y cuécelas enteras, en agua o al vapor, con la piel hasta que estén blandas, llevarán aprox. 45 minutos, pero el tiempo varía según el tamaño de las patatas. Es importante verificar siempre su nivel de cocción con un tenedor. 

  Cuando las patatas estén cocidas, colócalas en el pasapurés enteras y con la piel, ya que la piel quedará en el pasapurés. Dispón las patatas trituradas sobre la mesa de trabajo o en un bol y deja enfriar. Esto también es importante, ya que las patatas frías absorben menos harina.

  Cuando las patatas se hayan enfriado, añade la mantequilla blanda en trozos, el huevo, la sal, la pimienta y la harina, y amasa rápidamente con las manos, hasta obtener una masa homogénea, suave y no pegajosa. Trabájala rápidamente y no la trabajes demasiado, ya que cuanto más la trabajes, más harina absorberá y tendrás que seguir añadiendo para obtener una masa no pegajosa. La cantidad de harina es indicativa, ya que también depende del tipo de patatas.

  

• Para preparar el relleno de los raviolis, lava y pela las manzanas, elimina el corazón y córtalas en cubitos de aprox. 8 x 8 mm. Derrite la mantequilla en una sartén añadiendo las ramitas de tomillo. Luego añade los cubitos de manzana y saltéalos junto con la mantequilla por unos minutos, solo el tiempo necesario para que se ablanden un poco, deben quedar firmes. Salpimienta y reserva para que se enfríen.

  Mientras tanto, corta el queso en cubitos, luego añádelos a las manzanas tibias, mezcla y deja enfriar completamente.

  

• Lava y pela las manzanas, elimina el corazón y córtalas en rodajas finas. Derrite la mitad de la mantequilla en una sartén y pon las rodajas de manzana a dorar por unos minutos, hasta que se ablanden, rocía con el vino blanco y deja evaporar. Salpimienta. Añade la mantequilla restante, cuando se haya derretido retira del fuego.

  

• Corta la masa en 6 piezas. Toma el primer trozo, divídelo por la mitad y extiende ambas mitades sobre una superficie enharinada, hasta obtener un rectángulo de aprox. 25 x 10 cm. Añade 4 montoncitos de relleno a lo largo de la masa, dejando libre unos cm entre uno y otro y también a lo largo de los bordes. Cubre todo con la segunda mitad de la masa, presionando bien a lo largo de los bordes y entre los distintos montoncitos de relleno. Empareja los bordes y pasa los dientes de un tenedor a lo largo de los dos bordes largos, presionando ligeramente, para que las dos capas de masa se adhieran entre sí y en la cocción no se salga el relleno. 

  Con la ayuda de una rueda corta-pasta o un cuchillo afilado, corta los cuatro raviolis. Haz que los bordes recién cortados se adhieran con la ayuda de los dedos o pasando los dientes del tenedor por allí también.

  Coloca los raviolis en una tabla bien enharinada y procede de la misma manera con la masa y el relleno restantes.

  Lleva a ebullición abundante agua en una olla grande, sala e introduce los raviolis, idealmente en 2-3 tandas, no todos juntos, según la capacidad de la olla. Deja cocinar por unos minutos, luego saca los raviolis del agua con la ayuda de una espumadera y colócalos directamente en la sartén con las rodajas de manzana doradas en la mantequilla. Mezcla suavemente y distribuye los raviolis en los platos. Termina espolvoreándolos con las avellanas tostadas y hojitas de tomillo.