Las albóndigas rellenas con aceitunas son ideales como segundo plato y también para añadir a la mesa en los buffets de las fiestas y ocasiones especiales para enriquecer el menú.
Son fáciles de preparar y se pueden servir ensartadas en un palillo largo para cogerlas sin pringarse las manos de grasa.
Se pueden preparar las albóndigas rellenas con aceitunas indistintamente con las negras o las verdes, según se prefiera, lo importante es que estén deshuesadas
- Dificultad: Fácil
- Costo: Medio
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 4 Personas
- Métodos de Cocción: Fuego
- Cocina: Italiana
Ingredientes
- 300 g Carne de res (Molida)
- 70 g Pan rallado
- 50 g Grana padano
- 1 Huevo (+ una yema)
- c.s. Sal fina
- c.s. Romero (En polvo)
- 70 g Aceitunas verdes en salmuera (Deshuesadas)
- 3 cucharadas Aceite de oliva virgen extra
- 1 vaso Vino blanco
Utensilios
- Sartén
Preparación
Batir los huevos en un plato y verter en un bol grande. Añadir el pan rallado, el queso grana rallado, (reservar una cucharada aparte para rellenar las aceitunas) sal fina, romero en polvo y mezclar todo con el tenedor.
Tomar pequeñas cantidades de la mezcla y formar las albóndigas redondas en la palma de la mano. Hacer un hueco en el centro de cada albóndiga. Rellenar con un trocito de queso el hueco del hueso.
Poner un poco más de mezcla encima para cerrar las albóndigas. Freír las albóndigas con el aceite de oliva virgen extra, dándoles la vuelta a menudo y rociarlas luego con vino blanco. Cocinar con tapa durante unos diez/quince minutos a fuego moderado. Decorar con ramitas de romero.
Las albóndigas rellenas con aceitunas son deliciosas tanto calientes como frías. También se pueden preparar con antelación y luego calentarlas en el microondas unos minutos antes de servirlas.
Albóndigas rellenas con aceitunas
Las albóndigas rellenas con aceitunas son como las pipas, una lleva a otra, suculentas y nutritivas. Esta receta es apta también para los niños pequeños que, como bien sabemos, se vuelven locos por las albóndigas y si queremos hacerles felices, basta con muy poco para contentarles. Las albóndigas en mis tiempos eran un clásico para el domingo y todavía la tradición continúa en mi casa con la aprobación de todos los miembros de la familia. Además, ven a echar un vistazo en Pinterest de La cocinera que recupera

