La sopa de garbanzos es un primer plato perfecto en otoño o en invierno, cuando se necesita un mimo. Es un plato extremadamente económico, como todos los platos preparados con legumbres, pero tan bueno que nunca me cansa. A algunos les gusta con pasta, yo en cambio lo prefiero así, tal vez acompañado con pan tostado, pero si prefieres queda genial con pasta corta. Preparada con poquísimos ingredientes, deben ser de excelente calidad, incluso el chorrito de aceite crudo que da a nuestra crema el toque final. Es una sopa, así que he triturado una parte de garbanzos dejando algunos aparte para enriquecer nuestra sopa. Sin embargo, podemos no dejar ninguno entero, si no te gustan, obtendremos una crema deliciosa. No nos queda más que ponernos manos a la obra y preparar juntos nuestra sopa de garbanzos.
¡Si te gustan los primeros platos, te dejo algunas recetas para probar!
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 15 Horas
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 4 personas
- Métodos de Cocción: Cocina
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno
Ingredientes
Ingredientes para la sopa de garbanzos
- 250 g garbanzos secos
- 1 cebolla
- 1 zanahoria
- 1.5 l caldo vegetal
- c.s. sal pimienta
- 4 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 150 g pan
- 4 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 1 diente ajo
Herramientas para la preparación de la sopa de garbanzos
- 1 Batidora de inmersión
- 1 Sartén
Preparación de la sopa de garbanzos
Ponemos a remojo los garbanzos en agua fría y los dejamos durante unas 15 horas. Yo cambio el agua un par de veces. Pasado el tiempo de reposo, escurrimos los garbanzos y los enjuagamos.
Limpiamos la cebolla y la zanahoria y las picamos groseramente. Las sofreímos en una olla con el aceite de oliva virgen extra. Añadimos los garbanzos y los tostamos un par de minutos. Cubrimos con el caldo vegetal.
Cubrimos con una tapa y dejamos cocinar hasta que los garbanzos estén bien tiernos (una hora y media en una olla y la mitad del tiempo si usamos una olla a presión). Reservamos algunos garbanzos y trituramos el resto con un pasapurés o con la batidora de inmersión.
Prepara los picatostes cortando el pan en cubos. En una sartén antiadherente pon un chorrito de aceite y el ajo. Añade el pan y tuéstalo un par de minutos hasta que esté crujiente.
Sirve la sopa de garbanzos. Añade algunos garbanzos enteros, pimienta, un chorrito de aceite y algunos picatostes crujientes. Lleva a la mesa bien caliente.
Conservación
La sopa de garbanzos se puede conservar en el frigorífico, en un recipiente cerrado, durante dos o tres días.
