He hecho muchísimas masas fermentadas, vosotros que me conocéis sabéis que podéis encontrar de todo en este blog. Estaba allí investigando qué podría preparar y me surgió una pregunta: ¿cómo no he podido preparar los cinnamoroll suaves de canela? ¡Un clásico con una especia que adoro aún falta! Et voilà, suaves, súper perfumados, mantecosos con un glaseado de queso crema de locura. Yo los he preparado con levadura de cerveza, pero podemos tranquilamente prepararlos con masa madre usando 100 gr, refrescada, y quitando 60 gr de harina de la mezcla y 30 ml de leche. No nos queda más que remangarnos y preparar juntos los cinnamoroll suaves de canela.

Dificultad: Media
Costo: Económico
Tiempo de reposo: 5 Horas
Tiempo de preparación: 40 Minutos
Porciones: 12 piezas
Métodos de Cocción: Horno
Cocina: Italiana

Ingredientes para los cinnamoroll

10 g levadura de cerveza fresca
500 g harina 00
180 ml leche
75 g azúcar
55 g mantequilla
2 huevos
1 pizca sal
60 g azúcar moreno de caña
2 cucharaditas canela en polvo
60 g mantequilla
120 g queso fresco para untar
3 cucharadas mantequilla
80 g azúcar glasé avainillado
1 cucharadita extracto de vainilla

Herramientas

Amasadora

Preparación

empezamos a preparar nuestros cinnamoroll poniendo en la amasadora la harina con la levadura y la leche tibia. Añadimos un huevo a la vez y, cuando se hayan absorbido, el azúcar y finalmente la mantequilla en trozos y la sal. Trabajamos hasta obtener una masa lisa y elástica que dejamos fermentar en un bol, cubierto con un paño hasta que doble su volumen.
Preparamos el relleno trabajando la mantequilla en crema. Mezclamos el azúcar moreno con la canela. Cuando la masa esté bien fermentada, la extendemos formando un rectángulo. Untamos con la mantequilla y espolvoreamos con el azúcar con canela. Enrollamos la masa formando un largo rollo que cortamos en 12 rodajas. Colocamos las espirales obtenidas a fermentar en una bandeja cubierta con papel de horno.
Cuando estén bien fermentadas las horneamos en horno estático, a 180° durante unos 25 minutos. Mientras tanto, preparamos el glaseado de queso crema: trabajamos la mantequilla pomada. Añadimos el queso fresco para untar, el azúcar glasé y la vainilla y mezclamos obteniendo una crema que ponemos en una manga pastelera.
Sacamos del horno nuestros cinnamoroll y con la manga decoramos con el glaseado de queso crema.