La sopa de judías y calabaza es una receta tradicional sencilla pero rica en sabor, perfecta para quienes aman los platos de la cocina italiana que calientan el corazón y la mesa.
Es un plato reconfortante ideal para el otoño y el invierno, cuando crece el deseo de platos calientes, nutritivos y económicos, para preparar con ingredientes de temporada.
Esta receta es especialmente apreciada por quienes buscan platos saludables y genuinos, porque une las propiedades de la calabaza y las judías en una combinación perfecta.
La calabaza es ligera, baja en calorías y rica en vitaminas (especialmente A y C), antioxidantes y fibras que ayudan a la digestión.
Las judías son una valiosa fuente de proteínas vegetales, hierro y sales minerales, perfectas para dar energía y hacer de la sopa un plato saciante y completo.
Es por lo tanto un plato adecuado para toda la familia, ideal para quienes siguen una alimentación equilibrada, perfecto si sigues una dieta vegetariana y excelente cuando se busca un plato sabroso y económico para servir en lugar de carne.
Prepararla es simple y personalizable: podrás hacerla más rústica, cremosa o enriquecerla con especias y cereales para transformarla en un plato único que nunca cansa.
La sopa cremosa con judías y calabaza es un plato saludable genuino y nutritivo, perfecto también para quienes siempre van con prisa y tienen poco tiempo para cocinar.
En el artículo descubrirás la versión rápida con judías enlatadas y la clásica con legumbres secas.
Y después te esperan consejos para obtener la consistencia ideal, variantes vegetarianas y veganas, y sugerencias sobre el maridaje de vinos 🍷😍
Además de esta deliciosa sopa de judías y calabaza, te dejo algunas otras recetas deliciosas para probar!
- Costo: Muy económico
- Tiempo de preparación: 5 Minutos
- Porciones: 4 personas
- Métodos de Cocción: Cocina
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno, Verano, Otoño
Ingredientes
- 300 g Calabaza
- 400 g Judías cannellini
- 2 rebanadas Jamón crudo (puedes sustituirlo por speck)
- 40 g Apio
- 1 zanahoria (mediana pequeña)
- Media cebolla
- 1 ramita Romero
- c.s. Pimienta (solo si te gusta)
- Aceite de oliva (uno por persona es suficiente)
- Sal
Utensilios
- Cacerola
- Tabla de cortar
- Cuchillo
- Rallador
Preparación
Primero limpia la calabaza y córtala en cubos pequeños, también puedes comprar la calabaza ya limpia y cortada en rodajas para que sea más rápido cortarla en cubos.
Toma una cacerola, añade unas cucharadas de aceite y sofríe el apio, la zanahoria rallada, un poco de cebolla finamente picada y el jamón crudo cortado en trozos pequeños que puedes sustituir por speck si prefieres.
Luego añade la calabaza y cocina por unos 5 minutos. Luego agrega las judías cannellini (o borlotti) junto con el agua de conservación. Ajusta de sal, aromatiza con una ramita de romero, pimienta y especias al gusto.
Cocina a fuego lento durante unos 10-15 minutos. Yo prefiero que la calabaza no se convierta en puré sino que quede entera, así que después de este tiempo prueba y si te gusta la consistencia obtenida, apaga el fuego.
Una vez lista, puedes elegir si servir tu deliciosa sopa así, si triturarla completamente o solo a la mitad, o si acompañarla con pasta típica para sopas (por ejemplo, ditalini).
¡Tu deliciosa Sopa de judías y calabaza está lista para ser servida en la mesa! Un plato saludable genuino rápido de preparar y económico.
Si quieres obtener una sopa aún más sabrosa y genuina, puedes usar judías secas en lugar de las enlatadas. Así es como hacerlo.
Coloca las judías secas en un cuenco grande y cúbrelas con abundante agua fría. Añade un poco de bicarbonato (opcional, pero ayuda a hacerlas más digestivas).
Déjalas en remojo durante 8-12 horas (toda una noche es lo ideal). Durante el remojo, las judías duplicarán su volumen.
Al final, escurre las judías y enjuágalas bajo agua corriente. Este paso elimina las sustancias que podrían hacerlas más pesadas.
Colócalas en una olla con abundante agua fría, una hoja de laurel y, si quieres, una costa de apio.
Lleva a ebullición y cocina a fuego lento durante 60-90 minutos, hasta que estén tiernas.
Importante: no salar el agua de cocción, de lo contrario la piel de las judías se endurece.La sal se añade siempre al final de la cocción.
Una vez listas, puedes usarlas inmediatamente para preparar la sopa con la calabaza.Si cocinas en cantidad, conserva las judías sobrantes en el frigorífico (con parte de su agua de cocción) durante 2-3 días, o congélalas en porciones.
💡 Consejo extra: para acelerar los tiempos puedes usar la olla a presión: en unos 30 minutos las judías estarán listas.
¿Ya tienes la boca hecha agua? 😋 Prepara tu sopa de judías y calabaza y cuéntame en los comentarios cómo te ha quedado!
Si te ha gustado la receta, compártela con amigos y familiares 🥰 para tus noches otoñales 🍂Artículo protegido por derechos de autor © – Gabriella Geroni © Reproducción Reservada
❓¿A QUIÉN LE VA BIEN ESTA RECETA? 🥣👩🍳
Perfecta para quienes buscan platos saludables y nutritivos (legumbres + verduras).
Apta para vegetarianos (si omites carne o embutidos) y para flexitarianos.
Útil para quienes quieren recetas económicas con ingredientes simples y de temporada.
Excelente para noches otoñales/invernales, un plato reconfortante que calienta sin ser demasiado pesado.
Puede convertirse en plato único, especialmente si se enriquece con cereales o se acompaña de pan integral.
Puede convertirse en plato único, especialmente si se enriquece con cereales o se acompaña de pan integral.
💡 Consejos útiles para servir la sopa de judías y calabaza
Sírvela muy caliente: la sopa desprende todo su aroma cuando está bien caliente, tal vez en cuencos de barro que mantienen el calor por más tiempo.
Aceite de oliva virgen extra en crudo: un hilo de buen aceite en crudo realza el sabor de la calabaza y hace que la sopa sea aún más cremosa.
Picatostes de pan: prepara unos picatostes dorados en el horno/freidora de aire o en la sartén con un hilo de aceite y romero; son el acompañamiento perfecto.
Queso rallado: una pizca de Parmigiano Reggiano o Grana Padano enriquece el plato con una nota sabrosa y envolvente.
Hierbas aromáticas frescas: romero, tomillo o salvia dan un aroma irresistible y un toque rústico.
Un toque picante: si te gustan los sabores fuertes, añade guindilla fresca o seca.
Versión más ligera: reduce el aceite y usa solo caldo de verduras para un plato ligero pero sabroso.
Versión más rica: añade cereales como cebada, espelta o arroz para transformarla en un plato único completo y saciante.
🥣 ¿Cómo conservar la sopa de judías y calabaza?
Si te sobra sopa no te preocupes, se conserva muy bien y ¡está aún más buena al día siguiente!
👉 En el frigorífico
Deja que la sopa se enfríe completamente. Transfiérela a un recipiente hermético y consérvala en la nevera por 2-3 días.
Al calentarla, añade un poco de agua o caldo para devolverle la consistencia deseada.
👉 En el congelador
Divide la sopa en porciones (utiliza tarros de vidrio resistentes al frío o recipientes para congelador).
Congélala por un máximo de 2-3 meses.
Para descongelarla, déjala en el frigorífico toda la noche y luego caliéntala suavemente en la olla.
💡 Consejo práctico: si ya sabes que vas a congelar la sopa, evita añadir la pasta: mejor cocerla aparte cuando la calientes, así quedará al dente.🎃 ¿Cuánto tiempo debe cocer la calabaza en la sopa?
Depende del tamaño de los cubos; si son pequeños, aproximadamente 10-15 minutos en la sopa, hasta que esté tierna pero no deshecha.
🍃 ¿Qué especias/aromas combinan bien?
Romero, salvia, tomillo, pimienta negra, pimentón ahumado o un toque de guindilla para los que quieren un toque picante.
🌽 ¿Se puede añadir pasta?
Sí, ditalini, cebada o pequeños formatos de sopa van bien. Añádelos solo en los últimos minutos para que no se cocinen demasiado.

