La preparación de la que me gustaría hablaros hoy trata sobre los kumquats o mandarinas chinas. Para poder conservar la fruta entera durante mucho tiempo o recuperar dichas frutas o las cáscaras (por cierto, muy perfumadas y dulcísimas) usadas para hacer el licor, las someteremos a un confitado muy, muy simplificado y decididamente más rápido que nos permitirá usarlas para enriquecer, rellenar o decorar postres, dulces y bebidas de varios tipos. Los kumquat confitados también pueden degustarse al natural, como una especie de caramelo.

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 30 Minutos
- Tiempo de preparación: 30 Minutos
- Porciones: 750 gramos
- Métodos de Cocción: Fuego lento
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 500 g kumquat o mandarinas chinas
- 250 g azúcar granulada
- 1/2 limón
- 1 pizca sal fina
Instrumentos
- 1 Cepillo
Pasos
Podemos usar un solo tarro con tapa hermética o varios tarros. Yo prefiero dividir los kumquats confitados en tarros pequeños, para no tenerlos abiertos demasiado tiempo cuando los uso. Además, son una deliciosa idea de regalo para todo el año.
Lavamos los frutos de kumquat, cepillando la cáscara para eliminar cualquier tipo de impureza.
Cortamos los frutos a la mitad, haciendo esta operación directamente en la olla que usaremos para confitar la fruta, evitando así perder jugo eventualmente.
Añadimos la cáscara y el jugo de medio limón (que ayudará a mantener el color y resaltar el sabor), la pizca de sal fina y el azúcar granulada.
Mezclamos bien y cubrimos. Dejamos reposar la mezcla durante 30 minutos o incluso todo el día o la noche; durante este tiempo, el azúcar, al contacto con la fruta, hará que se libere el líquido de vegetación de los kumquats, facilitando la cocción y la formación del jarabe. Decidiréis vosotros, según vuestros tiempos y necesidades.
Después del tiempo de reposo, llevamos la olla al fogón más pequeño a fuego medio y, removiendo de vez en cuando, esperamos a que el azúcar se derrita.
Mientras tanto ya habremos esterilizado el tarro o los tarros para contener la fruta confitada.
En cuanto el azúcar se haya derretido completamente (pocos minutos), vertemos los frutos confitados en los tarros, con el jarabe incluido, llenándolos hasta la base del cuello (el cuello del tarro debe quedar libre, por favor), cerramos inmediatamente y los invertimos para permitir la formación del vacío.
Los kumquats están listos para usarse inmediatamente; guardamos los tarros en un lugar fresco y oscuro.
Algunos consejos prácticos
– Para derretir el azúcar se necesitan pocos minutos; si deseáis que el jarabe resulte más denso, más concentrado, aumentad el tiempo de cocción hasta aproximadamente 20/25 minutos como máximo, o hasta que veáis que comienza a concentrarse cada vez más.
– Podemos caramelizar también los frutos o las cáscaras de kumquat utilizadas para hacer los licores (hay, de hecho, quienes usan solo las cáscaras y quienes usan los frutos enteros). Obviamente, en este caso, estarán y permanecerán impregnadas de alcohol. Tenedlo en cuenta al preparar dulces o bebidas, en caso de que los deban consumir niños o abstemios.