La mermelada de higos tiene un sabor delicado y naturalmente dulce, excelente en el desayuno untada en pan tostado con mantequilla o tal vez dentro de una deliciosa tarta.
Se puede preparar con higos blancos o con higos negros; hay quienes, como yo, la prefieren con trozos grandes, o quienes prefieren pasarla por el pasapurés para una versión suave y uniforme.
Gracias a la dulzura propia de estos frutos, es posible reducir la adición de azúcar, obteniendo así una mermelada más genuina.
La receta de mermelada de higos que os propongo es la que de niña ayudaba a mi madre a preparar y que hoy repito para mi familia, una receta sencilla y probada que huele a verano y tradición.
Es excelente el maridaje con quesos, entre estos, el que prefiero es con quesos de maduración media o azules.
- Dificultad: Media
- Costo: Muy económico
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Métodos de Cocción: Estufa
- Cocina: Italiana
- Energía 326,69 (Kcal)
- Carbohidratos 86,28 (g) de los cuales azúcares 81,96 (g)
- Proteínas 1,11 (g)
- Grasa 0,44 (g) de los cuales saturados 0,09 (g)de los cuales insaturados 0,31 (g)
- Fibras 4,28 (g)
- Sodio 2,07 (mg)
Valores indicativos para una ración de 100 g procesada de forma automatizada a partir de la información nutricional disponible en las bases de datos CREA* y FoodData Central**. No se trata de consejos alimentarios y/o nutricionales.
* CREATES Centro de Investigación sobre Alimentación y Nutrición: https://www.crea.gov.it/alimenti-e-nutrizione https://www.alimentinutrizione.it ** Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, Servicio de Investigación Agrícola. FoodData Central, 2019. https://fdc.nal.usda.gov
Ingredientes
- 1600 g higos
- 600 g azúcar
- 4 cucharadas jugo de limón
Herramientas
- 3 Tarros con tapa de rosca twist-off (2 de 500 g, 1 de 250 g)
- 1 Olla grande con fondo grueso
- 1 Olla alta
Preparación
Comenzamos la receta de mermelada de higos, esterilizando los tarros y las tapas que necesitaremos.
Después de lavarlos bien, colocamos los frascos en una olla alta sobre un paño de cocina limpio.
Ponemos uno también para separar los frascos entre sí, para amortiguar posibles golpes.

Cubrirlos completamente con agua y una vez alcanzada la ebullición, mantener en el fuego durante 20 minutos bajando la llama.Luego añadir las tapas y continuar la esterilización por otros 10 minutos.
Apagar y de la manera más delicada posible, dejar escurrir gran parte del agua y luego retirar los frascos y las tapas.
Dejarlos secar en un paño de cocina limpio.
Ahora nos ocupamos de los higos. Lavarlos sin sumergirlos en agua y limpiarlos eliminando el pedúnculo y solo en la mitad de ellos quitar la piel (que es un espesante natural y por lo tanto útil para espesar).
Pesar los higos sin los desechos.
Cortar cada uno en 4 cuartos y si quieren trozos pequeños, cortar cada cuarto por la mitad.
Poner los higos en una olla grande con fondo grueso.
Añadir el jugo de limón filtrado y a fuego alto y sin tapa, cocinar hasta que alcancen una consistencia ni demasiado líquida, ni demasiado espesa.
En resumen, deberíamos alcanzar la consistencia final que nos gustaría para nuestra mermelada.
Tomará alrededor de media hora, durante la cual hay que remover a menudo para verificar que la fruta no se pegue al fondo y para monitorear cuando nos estamos acercando a la consistencia adecuada.
Eliminar con la espumadera la acidez que aflora en la superficie.
Si se pega, mover todo a otra olla para que no se generen malos olores en la mermelada.
Transcurrido este tiempo, retirar momentáneamente del fuego (si se desea sin trozos, pasar por el pasapuré) y añadir el azúcar.
Remover con una cuchara de madera.
Volver a poner en el fuego y desde que comienza a hervir, cocinar a fuego moderado durante otros 20 minutos, removiendo muy a menudo.
Apagar el fuego.
Si queremos realizar la pasteurización, dejar enfriar un poco la mermelada, verterla luego en los frascos previamente esterilizados junto con las tapas ya secas.
Llenar dejando un centímetro libre o más, bajo el borde del frasco.
Limpiar bien los bordes con papel absorbente ligeramente humedecido y secar con otro papel.
Si tienen el embudo para mermeladas, utilizándolo evitarán ensuciar el borde del frasco.
Les recomiendo, para sus mermeladas usen tapas nuevas, porque tapas ya usadas podrían tener deformaciones tal vez no visibles, pero que impedirían la formación del vacío.
Cerrar los frascos, colocarlos en una olla grande poniendo paños en el fondo de la olla y para separar los frascos entre ellos de modo que, tambaleando en la fase de ebullición, no se rompan golpeándose entre sí.
Llenar con agua templada hasta cubrir completamente los frascos, cerrar con tapa y llevar a ebullición.
Cuando empiece a hervir, bajar la llama, apartar la tapa y continuar en el fuego durante 20 minutos.
Si el nivel del agua desciende dejando un poco descubiertos los frascos, añadir más agua hirviendo para no perder la ebullición.
Dejar enfriar completamente dentro de la olla antes de extraer los frascos.
Verificar siempre que se haya creado el vacío, si es así, la parte central de la tapa será absorbida hacia adentro.
Pasteurizando de esta manera los frascos, su mermelada se conservará 8-10 meses.
Si por el contrario prevén consumirla en breve tiempo (2-3 meses), pueden envasar la mermelada hirviendo y lo ideal sería que también los frascos y tapas estuvieran aún cálidos de la esterilización.
Cerrar inmediatamente el frasco con tapa twist-off y voltearlo, dejándolo así hasta que esté frío.
Comprobar que se haya creado el vacío presionando en el centro del frasco, no se debe escuchar el clásico clic-clac y la tapa debe ser absorbida hacia adentro. En caso contrario, hay que cambiar el frasco y la tapa y hervir durante 20 minutos pasteurizándolo.
Aquí están listas nuestras conservas siguiendo la receta de mermelada de higos que propongo.
Si desean pueden embellecer sus frascos de mermelada con telas a cuadros fijadas con cordeles rústicos y para identificarlas bien, añadir etiquetas con el tipo de mermelada que contienen.
Conservación
Guardar en la despensa en un lugar oscuro y fresco. Si se pasteurizan se conservan 8-10 meses, si en cambio hemos creado el vacío volcando el frasco, consumir en 2-3 meses. Una vez abiertos, conservar en la nevera y consumir en aproximadamente una semana.
Guardar en la despensa en un lugar oscuro y fresco. Si se pasteurizan se conservan 8-10 meses, si en cambio hemos creado el vacío volcando el frasco, consumir en 2-3 meses. Una vez abiertos, conservar en la nevera y consumir en aproximadamente una semana.
Aquí una selección de productos sumamente útiles para realizar dulces. Muchos de ellos han sido comprados y probados por mí misma. Para ver los productos recomendados haz clic aquí.
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