El bizcocho con masa madre suave y aromático es uno de esos dulces que forman parte de nuestra tradición familiar, un dulce simple, genuino, que realmente sabe a hogar y a tiempos pasados.
Este es uno de esos dulces que se preparan por la noche, cuando la casa está silenciosa, y se hornean temprano por la mañana, cuando el aroma invade la cocina.
Un bizcocho sencillo, hecho con calma, que cuenta la tradición y evoca los gestos lentos de antaño.
Porque ciertas recetas nunca pasan de moda.
Es un bizcocho “pobre” en ingredientes, pero rico en sabor, perfecto para el desayuno o la merienda de toda la familia.
Mi desafío siempre ha sido preparar el bizcocho clásico utilizando la masa madre, que digiero más fácilmente y que le da al dulce un sabor único.
Después de varias pruebas he simplificado el procedimiento, eliminando el fermento y realizando una sola masa, mucho más cómoda: se prepara por la noche, fermenta toda la noche y por la mañana está listo para ser horneado.
El resultado es un bizcocho alto, suave y aromático, con un sabor auténtico, como los de antaño.
Antes de pasar a la receta otras ideas simples con masa madre
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 8 Horas
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 12
- Métodos de Cocción: Horno, Horno eléctrico
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 170 g masa madre (bien activa)
- 250 g azúcar
- 200 g leche (tibia)
- 160 g aceite de semillas
- 4 huevos
- 350 g harina 00
- aroma de vainilla (o sambuca, ron, cáscara de naranja o limón)
- gotas de chocolate (opcionales)
- azúcar (opcional para decorar la superficie)
Herramientas
Para la cocción he utilizado un molde para bizcocho de 26 cm de diámetro
- 1 Amasadora
- 1 Molde para bizcocho
Pasos
Para preparar el bizcocho con masa madre empiezo siempre con una masa madre sólida muy activa, capaz de duplicar en aproximadamente 3-4 horas a una temperatura de 21/22°C.
En un cuenco grande (o en la amasadora) disuelvo la masa madre en la leche ligeramente tibia.
Añado el azúcar y los huevos, mezclando bien hasta obtener una mezcla homogénea.
Incorporo el aceite de semillas poco a poco y luego añado la harina poco a poco, continuando a mezclar hasta tener una masa lisa, fluida y sin grumos.
En este punto aromatizo la masa con aroma de vainilla, pero podemos utilizar el aroma que prefiramos: sambuca, maraschino, ron o la cáscara rallada de limón o naranja.
Vierto la masa en el molde para bizcocho de 26 cm, bien enmantecado y enharinado.
Antes de hornear podemos enriquecer la superficie con gotas de chocolate y, si nos gusta, una espolvoreada de azúcar granulada.
⚠️ Es importante añadir cualquier ingrediente solo en la superficie y justo antes de hornear: la masa es bastante líquida y, durante las horas de fermentación, las adiciones terminarían todas en el fondo del molde.
Esta vez lo he preparado simple, porque así me encanta.
Cubrimos el molde con film o un paño y dejamos fermentar a temperatura ambiente durante toda la noche, unas 8 horas.
No esperéis un gran crecimiento visible: el bizcocho completará la fermentación en el horno.
Por la mañana horneamos en horno estático ya caliente a 180°C durante aproximadamente 35-40 minutos, hasta que la superficie y los bordes estén bien dorados.
Siempre hacemos la prueba del palillo antes de sacar del horno.
Dejamos enfriar un poco y disfrutamos de este bizcocho con masa madre, suave y aromático, con un sabor auténtico que realmente evoca los dulces de antaño.
📝 Notas finales de Tía Debby
Este bizcocho con masa madre es uno de esos dulces que no necesitan grandes añadidos para ser bueno.
El secreto está todo en la paciencia, en una masa madre bien activa y en respetar los tiempos: la fermentación nocturna hace el resto.
Si queréis, podéis personalizarlo cada vez de manera diferente cambiando el aroma o enriqueciendo la superficie, pero os aconsejo probarlo al menos una vez en su versión simple, porque es así como se aprecia su sabor auténtico.
Es un dulce que mejora incluso al día siguiente, perfecto para preparar con calma y disfrutar lentamente, tal vez en el desayuno con una taza de leche o café, tal como se hacía antes.
FAQ (Preguntas y Respuestas)
¿Puedo preparar el bizcocho con masa madre sin amasadora?
Por supuesto, podéis prepararlo tranquilamente a mano utilizando un batidor o una cuchara de madera. Lo importante es disolver bien la masa madre en la leche y obtener una masa lisa y sin grumos.
¿Por qué el bizcocho no crece mucho durante la fermentación?
Es normal: esta masa completa gran parte del crecimiento directamente en el horno. No esperéis una gran fermentación visible durante el descanso nocturno.

