Este verano se ha caracterizado por un calor anómalo, excesivo e incesante, al menos en lo que respecta al sur de Italia. ¡Disfrutar de algo fresco sin excederse demasiado en calorías es fundamental! Entonces, ¿qué mejor que un buen gelo de sandía? En Catania, el gelo por excelencia es el de almendras, pero entre las variantes, esta es sin duda la más refrescante y genuina. Se trata de un ligero postre de cuchara, con deliciosas gotas de chocolate que simulan las semillas de esta refrescante fruta. Muy popular especialmente en Palermo, siendo el dulce tradicional de la fiesta de Santa Rosalía, patrona de la ciudad, no falta en otras zonas de Sicilia. Obviamente con sus infinitas variaciones tanto en la preparación como en los modos dialectales de llamarlo. El más conocido es el gelo de muluna o mellone, cuyo término dialectal indica precisamente la sandía. Fácil de preparar, es un perfecto postre también para quienes son intolerantes al gluten, ya que se realiza solo con almidón de maíz. ¡Dos únicas precauciones para el buen resultado del postre! En primer lugar, la elección de la sandía deberá ser roja y jugosa, para que, dependiendo del grado de dulzura, casi se puedan reducir las dosis de azúcar. La otra es la espera después de la preparación, que deberá ser de al menos tres horas en la nevera antes de desmoldarla, ya que de lo contrario afectará el resultado final. ¡Y ahora prepárenla y disfrútenla!
Si los postres de verano, frescos y refrescantes son vuestra pasión, os invito a echar un vistazo también a estas ideas a continuación:
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 3 Horas
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 12
- Métodos de Cocción: Fogón
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Verano
Ingredientes para un molde de 22 Ø:
⚠ EN ESTA RECETA HAY UNO O MÁS ENLACES DE AFILIACIÓN. Los productos que recomiendo son los mismos que uso en mis recetas; comprarlos a través de mi blog contribuye a apoyarme y a mi trabajo, mientras que a vosotros no os costará nada más.
- 1 l jugo de sandía (extraído de aproximadamente 3,5 Kg. de sandía)
- 90 g almidón de maíz
- 90 g azúcar moreno (las dosis pueden aumentar hasta 150 gr. según la dulzura de la fruta)
- 50 g gotas de chocolate negro
- 20 g virutas de chocolate
- 30 g harina de pistacho
- Unos pocos pistacho de Bronte DOP
Herramientas
- 1 Cuchillo
- 1 Centrífuga
- 1 Colador
- 1 Cazo
- 1 Cuchara de madera
- 1 Molde para rosquillas
- 1 Papel film para alimentos
Preparación
Corta la sandía en trozos y colócalos en una licuadora* o centrífuga hasta extraer un litro de jugo. Filtra el jugo obtenido con un colador para eliminar las semillas y las impurezas.
Transfiere el jugo poco a poco a una cacerola, mezclándolo con el almidón tamizado.
Una vez disuelto bien todo el almidón, añade también el azúcar y pon la cacerola al fuego a llama viva, revolviendo continuamente con una cuchara de madera como lo harías para una crema.
Lleva a ebullición, luego continúa revolviendo bajando la llama al mínimo por aproximadamente 5′ o hasta que el gelo se haya espesado y tomado un color más intenso.
Pasado este tiempo, retira el gelo del fuego y añade las gotas de chocolate. Mezcla homogéneamente y viértelo en tu molde de rosquilla o distribúyelo en moldes para helados si deseas hacer porciones individuales.
Deja enfriar el gelo a temperatura ambiente, luego colócalo en el frigorífico el tiempo necesario hasta que adquiera más o menos la consistencia de un pudín, tardará al menos 3 h, pero lo ideal sería toda la noche. Pasado este tiempo, desmóldalo en un plato de servir.
Decora la superficie con harina de pistacho como si fuera azúcar glas, las virutas de chocolate y los pistachos enteros.
Y voilà…¡el gelo de sandía con gotas de chocolate está listo para disfrutar!
¡Buen Provecho de La Cocina de FeFè!
Conservación
👉El gelo de sandía se puede conservar en la nevera bien cubierto con papel film de contacto por un máximo de 1-2 días. No recomiendo la congelación en el congelador para no alterar su consistencia.
Consejos, notas, variaciones y sugerencias
🟣* Si no tienes un extractor ¡no te preocupes! Primero, despepita cuidadosamente la sandía y no lo hagas al revés como se describe en la receta, asegurándote de que no haya semillas. Solo después podrás extraer el jugo de la sandía. Te bastará un batidora o licuadora: licúa y pasa el puré de fruta obtenido a través de un colador fino, para poder obtener solo el jugo.

