Alcachofas a la Sartén: la Receta Secreta de la Abuela
Las alcachofas a la sartén son un acompañamiento clásico de la cocina italiana, simple de preparar pero rico en sabor. Con su textura tierna y su sabor ligeramente amargo, se combinan perfectamente con una variedad de platos, desde carnes asadas hasta pescado a la parrilla, pasando por huevos.
Pero no solo eso: las alcachofas a la sartén también se pueden disfrutar como un aperitivo delicioso, añadidas a ensaladas mixtas para un toque de originalidad, o utilizadas como condimento para pasta o risottos. En resumen, ¡un verdadero comodín en la cocina!
Esta receta, transmitida en mi familia durante generaciones, es la que usaba mi abuela para preparar las alcachofas.
Todavía recuerdo el aroma que invadía la casa cuando las cocinaba, y su expresión satisfecha mientras las servía en la mesa.
Era un plato sencillo, preparado con amor y con ingredientes genuinos, como los que se usaban antes.
Recuerdo que una vez, al no tener a mano la clásica sartén, mi abuela utilizó un cazo y el resultado fue igualmente delicioso!
Al igual que entonces, también utilicé un cazo para cocinar estas alcachofas.
Espero que esta receta les brinde la misma alegría y satisfacción que me ha brindado a mí y a mi familia.
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 10 Minutos
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 4
- Métodos de Cocción: Fogón, Fuego lento
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno, Otoño, Invierno y Primavera
- Energía 63,42 (Kcal)
- Carbohidratos 12,51 (g) de los cuales azúcares 1,02 (g)
- Proteínas 3,01 (g)
- Grasa 1,29 (g) de los cuales saturados 0,22 (g)de los cuales insaturados 0,17 (g)
- Fibras 5,92 (g)
- Sodio 255,52 (mg)
Valores indicativos para una ración de 130 g procesada de forma automatizada a partir de la información nutricional disponible en las bases de datos CREA* y FoodData Central**. No se trata de consejos alimentarios y/o nutricionales.
* CREATES Centro de Investigación sobre Alimentación y Nutrición: https://www.crea.gov.it/alimenti-e-nutrizione https://www.alimentinutrizione.it ** Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, Servicio de Investigación Agrícola. FoodData Central, 2019. https://fdc.nal.usda.gov
Ingredientes
- 10 alcachofas
- 2 dientes ajo
- 1 ramo perejil
- 2 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 1 pizca pimienta negra
- q.b. sal fina
Herramientas
- 1 Cazuela Wecook
Pasos
Para empezar, preparamos un bol con agua fría acidulada con el jugo de un limón. El agua acidulada sirve para prevenir la oxidación de las alcachofas, que de otro modo tenderían a oscurecerse.
Limpiamos las alcachofas eliminando las hojas externas más duras, quitándolas una a una hasta llegar a las más tiernas y de color verde claro. Con un cuchillo, cortamos la punta de la alcachofa, aproximadamente un tercio de su altura, y acortamos el tallo, eliminando la parte final más dura y fibrosa con un pelador.
El tallo, a menudo descartado, es en realidad una parte muy sabrosa de la alcachofa, solo hay que eliminar la parte externa más fibrosa para obtener un corazón tierno y delicioso.
Con la ayuda de un cuchillo afilado, eliminamos la «pelusa» interna de la alcachofa, es decir, el vello que se encuentra en su interior.
Para eliminar la «pelusa» interna de la alcachofa, podemos utilizar un cuchillo afilado o, mejor aún, un cepillo de verduras, que nos permitirá eliminar el vello de manera más efectiva. Cortamos la alcachofa por la mitad a lo largo, eliminando con el cuchillo la parte final del tallo que quede dura.
Dividimos cada mitad nuevamente en dos, obteniendo gajos de alcachofa.
Mientras limpiamos y cortamos las alcachofas, las sumergimos en el bol con agua y limón a medida que las preparamos, para que no se oscurezcan en contacto con el aire.
Simultáneamente, en una sartén grande, doramos los dientes de ajo ligeramente aplastados con el aceite de oliva virgen extra a fuego lento.
Cuando el ajo esté dorado, lo quitamos de la sartén y añadimos las alcachofas bien escurridas del agua y secas. Las doramos a fuego alto durante unos minutos, removiendo de vez en cuando. Desglasamos con medio vaso de vino blanco seco, añadimos la sal, una pizca de pimienta negra si se desea, y cubrimos la sartén con una tapa.
Dejamos cocinar a fuego moderado durante unos 20-30 minutos, o hasta que las alcachofas estén tiernas, añadiendo un poco de agua caliente durante la cocción si es necesario, para evitar que se peguen al fondo.
Para verificar la cocción, podemos pinchar un gajo de alcachofa con un tenedor: si entra fácilmente, significa que está listo.
Una vez cocidas, apagamos el fuego y, antes de dejarlas reposar, añadimos el perejil fresco picado a las alcachofas en la sartén.
Mezclamos suavemente para distribuir el perejil y luego dejamos reposar las alcachofas con la tapa durante unos diez minutos: esto permitirá que los sabores se mezclen mejor.
Emplatamos las alcachofas, añadiendo un hilo de aceite de oliva virgen extra en crudo y una pizca de pimienta negra.
Las servimos calientes o tibias como acompañamiento a platos de carne, pescado o huevos, o bien las disfrutamos como un aperitivo delicioso.
Aquí tienes algunos consejos para la conservación y deliciosas variaciones para tu receta de «Alcachofas a la sartén: la receta secreta de la abuela»
Conservación:
En frigorífico:
Las alcachofas a la sartén se conservan en el frigorífico durante 2-3 días, cerradas en un recipiente hermético.
En congelador:
Puedes también congelar las alcachofas cocidas, después de haberlas enfriado completamente. En este caso, se conservan durante unos 2-3 meses. Para descongelarlas, déjalas en el frigorífico durante una noche o utiliza la función de «descongelación» del microondas.
Calentamiento:
Para recalentar las alcachofas, puedes utilizar el microondas o una sartén antiadherente con un poco de aceite. Variaciones:
Alcachofas a la sartén con menta:
Sustituye el perejil por menta fresca para un aroma más fresco e intenso.
Alcachofas a la sartén con panceta:
Añade 50 g de panceta en cubitos al sofrito de ajo, para un toque sabroso y crujiente.
Alcachofas a la sartén con tomatitos:
Añade 200 g de tomatitos cherry cortados a la mitad durante la cocción de las alcachofas, para un sabor más rico y mediterráneo.
Alcachofas a la sartén picantes:
Añade un pimiento picante fresco picado al sofrito de ajo para una nota picante.
Alcachofas a la sartén con vino tinto:
Sustituye el vino blanco por vino tinto para un sabor más robusto e intenso.
Alcachofas a la sartén gratinadas: Después de la cocción a la sartén, coloca las alcachofas en una fuente para horno, espolvoréalas con pan rallado, queso parmesano rallado y un hilo de aceite, y gratínalas en el horno a 180°C durante 10 minutos, hasta que estén doradas y crujientes.
Consejos:
Para una presentación más elegante, puedes utilizar las alcachofas enteras, vaciándolas de la pelusa y rellenándolas con el relleno de ajo, perejil y aceite.
Si utilizas alcachofas congeladas, no es necesario descongelarlas antes de la cocción.
Puedes añadir una pizca de azúcar durante la cocción para contrarrestar el amargor de las alcachofas.
Para un toque de acidez extra, añade una cucharada de vinagre balsámico al final de la cocción.
¡Espero que estos consejos y variaciones te sean útiles para enriquecer tu receta y hacerla aún más deliciosa!

Vino para acompañar las alcachofas a la sartén receta secreta de la abuela;
Aquí tienes 5 vinos que se combinan perfectamente con las alcachofas a la sartén «receta secreta de la abuela», teniendo en cuenta el sabor delicado pero sabroso del plato:
Vermentino di Gallura DOCG (Cerdeña):
Un blanco fresco y sabroso, con notas de flores blancas y fruta de pulpa blanca, que equilibra el amargor de las alcachofas y resalta su frescura.
Verdicchio dei Castelli di Jesi DOC Classico Superiore (Marcas):
Otro blanco de gran elegancia, con aromas de almendra, hierbas aromáticas y una agradable mineralidad, que se combina a la perfección con la delicadeza de las alcachofas.
Grechetto di Todi DOC (Umbría):
Un blanco afrutado y floral, con notas de cítricos, melocotón blanco y un final ligeramente amargo, que recuerda el sabor de las alcachofas creando una armoniosa combinación.
Franciacorta Brut (Lombardía):
Las burbujas de un Franciacorta Brut, con su frescura y sabor, limpian el paladar del amargor de las alcachofas y acompañan agradablemente la comida.
Ribolla Gialla (Friuli-Venecia Julia):
Este vino blanco, con su aromaticidad y su nota salada, se combina excelentemente con las alcachofas, contrastando su sabor amargo y creando un equilibrio de sabores.
Consejos:
Sirve los vinos blancos bien fríos, alrededor de 8-10°C.*
Si prefieres un vino tinto, opta por un tinto joven y ligero, con pocos taninos, como un Pinot Nero del Oltrepò Pavese o un Schiava del Alto Adige.
¡Con estos vinos, tu «receta secreta de la abuela» será aún más especial!
Preguntas Frecuentes (FAQ)
Aquí tienes algunas preguntas y respuestas para tu receta «Alcachofas a la sartén: la receta secreta de la abuela»:
¿Qué tipo de alcachofas es mejor usar para esta receta?
Las alcachofas más adecuadas son las romanas, con hojas tiernas y corazón carnoso, o las alcachofas espinosas, de sabor más intenso. Como alternativa, también puedes utilizar las alcachofas violetas, que tienen un sabor más delicado.

¿Puedo usar alcachofas congeladas?
Claro, puedes utilizar también alcachofas congeladas, ya limpias y listas para usar. En este caso, el tiempo de cocción se reducirá a unos 15-20 minutos.
¿Cómo puedo evitar que las alcachofas se oscurezcan durante la preparación?
Para evitar la oxidación, sumerge las alcachofas a medida que las limpias y cortas en un bol con agua fría acidulada con el jugo de limón.

¿Es necesario quitar la «pelusa» interna de las alcachofas? Sí, es importante eliminar la pelusa, es decir, el vello interno de la alcachofa, porque es indigesta y puede resultar molesta al paladar. Puedes quitarla con un cuchillo afilado o con un cepillo de verduras.

¿Cuánto tiempo deben cocinarse las alcachofas a la sartén?
El tiempo de cocción varía según el tamaño y el tipo de alcachofas. En promedio, las alcachofas frescas se cocinan a la sartén durante unos 20-30 minutos a fuego moderado. Para verificar la cocción, pincha un gajo de alcachofa con un tenedor: si entra fácilmente, significa que está listo.
¿Qué puedo hacer si las alcachofas se secan demasiado durante la cocción?
Si las alcachofas tienden a pegarse al fondo o a secarse demasiado, añade un poco de agua caliente durante la cocción, un cucharón a la vez.
¿Con qué puedo servir las alcachofas a la sartén?
Las alcachofas a la sartén son un acompañamiento versátil que se combina con muchos platos. Son excelentes con carne asada, pescado a la parrilla, huevos, albóndigas, pero también como condimento para pasta o risottos. Puedes disfrutarlas también como un aperitivo delicioso, acompañadas de pan tostado.


