Pechuga de pollo cremosa al café, una recetita deliciosa para probar incluso para quienes no son amantes del café. Un plato con un sabor delicado, cremoso, muy sencillo de preparar y también muy rápido. Adecuado (como cada una de mis recetas) también para las menos expertas en cocina, pero no por eso menos bonito de presentar o menos bueno. En este caso quise usar yogur, porque es más ligero que la nata fresca, pero os dejo la preferencia aunque os animo a probarla tal como se describe. El pollo es un alimento que difícilmente no gusta y teniendo un sabor delicado, se presta a muchísimas recetas. Trataré, por tanto, de proponeros el mayor número posible. Un consejo que quiero dejaros es pedir que os lo corten más bien grueso, porque corre el riesgo de secarse demasiado y quedarse duro.
Os dejo a continuación los enlaces de algunas recetas realmente deliciosas:
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 2 personas
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno y Primavera
Ingredientes
- 350 g pechuga de pollo en rodajas ya limpia
- c.s. harina
- 2 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 1 tacita llena de café
- 125 g yogur natural entero
- 10 avellanas peladas
Herramientas
- 1 Cafetera
- 1 Sartén antiadherente
Preparación
Después de sacar del frigorífico la pechuga de pollo (o las rodajas ya preparadas por tu carnicero de confianza), la llevamos a temperatura ambiente (tardará aproximadamente una hora) y la secamos con papel absorbente, para eliminar cualquier residuo de humedad. Después de limpiarla, la cortamos en rodajas pero que sean gruesas. Finalmente, la preparamos para la cocción pasándolas por harina.
Ponemos dos cucharadas generosas de aceite de oliva virgen extra, dentro de una sartén antiadherente y doramos bien las rodajas de pechuga de pollo, hasta que se forme una costra (reacción de Maillard). Mantener siempre una llama viva, para evitar que los líquidos puedan salir de la carne. En este punto agregamos una taza bien llena de café hecho con la cafetera, de manera que quede más ligero que el espresso.
Añadimos también las avellanas picadas groseramente y dejamos reducir ligeramente. Agregamos inmediatamente después el yogur y ajustamos de sal y pimienta. Continuamos la cocción solo por unos pocos minutos, siempre a fuego alto.
Colocamos las rodajas en un plato para servir y rociamos con el fondo de cocción. Si la salsa se ha reducido demasiado, basta con verter un poco de agua caliente en la sartén y mezclar.
Servimos nuestra Pechuga de pollo cremosa al café inmediatamente, bien caliente, y decoramos con algunas avellanas enteras.
Consejos
La pechuga de pollo puede conservarse en el frigorífico por no más de tres días, pero dentro de un recipiente hermético, preferiblemente de vidrio o cerámica.
También podemos congelarla en porciones, pero recordemos descongelar siempre en el frigorífico y nunca a temperatura ambiente.
Para calentarla, el microondas irá muy bien.
