Peras caramelizadas con aroma de limón, se trata de un postre/dulce que requiere aproximadamente 10 minutos de cocción. Delicioso caliente en los periodos más fríos del año, acompañado quizás de nata montada fresca. Excelente también cuando hace más calor, junto a un buen helado de vainilla. En resumen, una delicia para disfrutar todo el año. Además, las peras caramelizadas pueden ser utilizadas también para rellenar tartas, crepes o lo que deseemos. Así que rápidas y facilísimas, adecuadas incluso para quien tiene poca experiencia en la cocina pero quiere quedar bien. Si tenéis tiempo, también os recomiendo conservarlas, así tendréis algunas ya listas por si las necesitáis en el último momento. Si es un procedimiento que nunca habéis probado, echad un vistazo a las Conservas caseras para aseguraros de que todo se haga correctamente.
Si os gustan los postres fáciles y rápidos, entonces no os perdáis las próximas recetas:
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 2 peras
- Métodos de Cocción: Fogón
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno
Ingredientes
- 2 peras medianas
- 60 azúcar moreno
- Medio limón jugo
Herramientas
- 1 Sartén
- 1 Exprimidor de limón
- 1 Colador
- 1 Cuchillo
- 1 Bol
Preparación
Cortamos las peras por la mitad, quitamos el corazón, la piel y las cortamos en rodajas de aproximadamente 1 centímetro y medio de grosor.
Las ponemos rápidamente en un bol y las rociamos con el jugo de medio limón, no solo para aromatizarlas, sino también para evitar que se oscurezcan (oxidación). Las colocamos dentro de una sartén antiadherente, agregamos el azúcar y cocinamos a fuego medio, cubriéndolas con una tapa.
Cuando adquieran un color dorado, destapamos y terminamos la cocción. Al final de la cocción, las peras no deben deshacerse, sino mantenerse bastante consistentes
Servimos nuestras Peras caramelizadas con aroma de limón, tanto calientes como a temperatura ambiente, y si lo deseamos, las decoramos con hojas de menta fresca.
Consejos
Las peras caramelizadas se conservan en el frigorífico por varios días, ya que están impregnadas de azúcar (excelente conservante natural).
Sin embargo, colócalas en un recipiente hermético, ya sea de vidrio o cerámica y nunca de plástico.
No te recomiendo congelarlas porque perderían toda su consistencia, pero como alternativa puedes ponerlas en conserva.

