Colocamos enseguida los huevos de codorniz en agua fría, en un cazo y cuando empiece a hervir dejamos cocer solo por 4 minutos. Transcurrido el tiempo necesario y no más, los escurrimos y los sumergimos en un bol con agua y hielo, para que se enfríen inmediatamente. Una vez completamente fríos, podemos pelarlos golpeándolos suavemente en los extremos y pasándolos bajo la palma de la mano para aplicar una ligera presión, que hará que se rompa el cascarón. De esta manera será más fácil quitar la cáscara.

Con un molde en forma de estrella, sacamos 16 tostas de las rebanadas de pan de molde (utilicé pan integral y con semillas). Elegí el tamaño de color violeta, pero cada uno de nosotros puede decidir según sus necesidades.

Colocamos las estrellitas en una bandeja forrada con papel para horno y las pincelamos con un hilo de aceite. Horneamos en un horno ya precalentado a 180°C y dejamos cocinar por unos 4 minutos, o hasta que se doren. Al final de la cocción, sacamos del horno y dejamos enfriar.

Dividimos en dos todos los huevos duros de codorniz y hacemos en 16 trocitos también las lonchas de salmón ahumado.

Extendemos un hilo de mayonesa en cada tosta (tanto como nos guste), colocamos encima una porción de salmón ahumado y finalmente medio huevo.

Sujetamos todo con un palillo y colocamos todas las tartaletas en una bandeja alta, o en un plato de servir.

Servimos enseguida nuestras Tostas con salmón y huevos de codorniz, pero no antes de haberlas espolvoreado con la ralladura de limón.