El risotto de calabaza fundente es un plato que preparo al menos una vez a la semana en mi casa. A todos les gusta mucho, es fácil y para mí es un auténtico mimo. Ahora siempre elijo la calabaza Vanity que tiene una textura y un sabor que se asemeja al de la castaña que adoro, pero podemos usar tranquilamente la calabaza que prefiramos o la típica de nuestra zona. Si te gustan los risottos fundentes prueba el risotto a la pizzaiola! No nos queda más que ponernos a trabajar y preparar juntos el risotto de calabaza fundente.
Si te gustan los risottos, lee las recetas que te dejo a continuación, ¡todas para probar!

- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 5 Minutos
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 4 Personas
- Métodos de Cocción: Fogón
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Otoño, Invierno y Primavera
Ingredientes para preparar el risotto de calabaza fundente
- 600 g calabaza
- 2 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 1 cebolla
- 320 g arroz Carnaroli
- 1 l caldo de verduras
- Medio vaso vino blanco seco
- 50 g mantequilla
- 50 g parmesano
- 120 g asiago
- c.s. sal y pimienta
Herramientas para la preparación del risotto de calabaza fundente
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- Cacerola
Preparación del risotto de calabaza fundente
Para preparar el risotto de calabaza empieza con la cocción de la calabaza. Corta finamente la cebolla y sofríela con un poco de aceite. Limpia la calabaza. Para quitar más fácilmente la piel, cocínala al vapor unos minutos. Córtala en trozos pequeños, añádela a la cebolla y cocina hasta que comience a desmoronarse (tardará unos 20 minutos), ayudándote con el caldo de verduras.
Añade el arroz y tuéstalo unos minutos. Desglasa con el vino. Llévalo a cocción agregando poco a poco el caldo y removiendo con frecuencia.
Retira el arroz del fuego, ajusta de sal y pimienta, añade la mantequilla que debe estar bien fría en trozos y el queso rallado. Deja reposar 5 minutos y mezcla. Añade el queso asiago en cubos, mezcla, deja reposar un par de minutos. Sirve bien caliente
Conservación
El risotto debe prepararse y consumirse inmediatamente. Será perfecto al día siguiente como arroz al salto.