Hoy receta navideña: galletas hombrecillos de jengibre (gingerbread man).
El hombrecillo de jengibre es una galleta aromatizada con jengibre que nace de la imaginación de la reina Isabel I de Inglaterra, quien los hacía preparar para sus invitados.
Se trata de galletas hechas de masa quebrada con un intenso aroma especiado de jengibre y canela y con forma de hombrecillo, que a menudo se utilizan como adornos para el árbol de Navidad después de haber sido decorados con glaseado real. Otras veces se empaquetan en latas o bolsitas para luego ser regalados en Navidad a los seres queridos, quizás junto con conservas caseras, turrón u otros productos típicos de este período.
La consistencia de estas galletas es suave y el color debería ser oscuro gracias a la presencia de la melaza que, al no ser fácil de encontrar, frecuentemente se sustituye con miel como he hecho yo. Preparar las galletas de jengibre es muy sencillo, naturalmente, como para todas las recetas, hay muchas versiones. Yo os dejo la mía, con la que me he encontrado mejor después de haber probado algunas. Podéis divertiros haciendo hombrecillos pero también estrellas, arbolitos o muñecos de nieve para alegrar vuestra mesa.
Veamos juntos, paso a paso, cómo realizar esta receta.
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 1 Hora
- Tiempo de preparación: 5 Minutos
- Porciones: 60 galletas
- Métodos de Cocción: Horno
- Estacionalidad: Navidad
Ingredientes para 60 gingerbread man
- 360 g harina 00
- 75 g azúcar de caña
- 75 g azúcar
- 1 huevo (mediano)
- 150 g mantequilla (fría)
- 150 g miel (o melaza)
- 2 cucharaditas jengibre en polvo
- 2 cucharaditas canela en polvo
- 1/2 cucharadita nuez moscada
- 1/2 cucharadita bicarbonato
- 1 pizca sal fina
- 130 g azúcar glas
- 30 g clara de huevo
- 1 cucharadita jugo de limón
- c.s. colorante alimentario rojo
Herramientas
A continuación encontrarás los enlaces de algunas herramientas utilizadas para realizar la receta
- 1 Balanza
- 1 Mezclador
- 1 Molde
- 1 Bandeja
- 1 Rodillo
¡Empezamos!
En el bol del mezclador ponemos la harina (dejando medio cucharada para la superficie de trabajo), el jengibre en polvo, la canela, la nuez moscada, la sal y la mantequilla fría en trozos, luego accionamos y hacemos que se desmenuce haciendo funcionar la máquina a la máxima velocidad durante unos segundos, después añadimos el huevo y la miel (o la melaza).
Accionamos de nuevo el mezclador a máxima velocidad y dejamos que funcione hasta que se forme una bola homogénea, llevará muy poco tiempo. Transferimos la masa obtenida a una superficie de trabajo donde habremos puesto la harina restante que dejamos al principio y amasamos rápidamente. La masa será muy suave, tratemos de trabajarla lo menos posible, luego envolvámosla en film plástico y pongámosla en el frigorífico durante al menos 1 hora.
Transcurrido el tiempo necesario, tomamos la masa y la dividimos en cuatro partes, tres las devolvemos al frigorífico y una la utilizamos. Extendemos sobre una superficie de trabajo la masa quebrada a un grosor de aproximadamente medio centímetro con la ayuda de un rodillo, la masa será suave, así que ayudémonos espolvoreando un poco de harina. Cortamos con nuestro molde y colocamos cada galleta en una bandeja con papel de horno, continuamos hasta agotar toda la masa.
Horneamos en horno precalentado a una temperatura de 180 grados durante 10/12 minutos, no os preocupéis si al sacarlas del horno parecen demasiado blandas, al enfriarse se endurecerán un poco.
Para decorar nuestras galletas necesitamos glaseado real, que es muy sencillo de preparar, para ser perfecto y tener líneas precisas el glaseado debe ser compacto y semi plástico, con las dosis que he utilizado he logrado una buena consistencia.
En un bol ponemos la clara de huevo con el jugo de limón y batimos rápidamente con las varillas para obtener una espuma, luego añadimos el azúcar glas y seguimos batiendo hasta obtener una mezcla compacta y densa. Vertemos un poco de glaseado real en un cuenco pequeño y añadimos un par de gotas de colorante rojo, luego mezclamos, si lo queremos más intenso añadimos una gota de color a la vez para evitar que el glaseado se vuelva demasiado líquido. Mientras no utilicemos el glaseado real, lo cubrimos con film plástico en contacto. Colocamos el glaseado real en una manga pastelera con una boquilla muy pequeña y decoramos nuestras galletas.
Decoramos las galletas hombrecillos de jengibre solo cuando estén bien frías, mejor aún si es al día siguiente. Mientras esperas, toma una foto a un hombrecillo, publícala en redes sociales etiquetándome (una riccia que pasticcia) y cuéntame a quién se las regalarás. ¡Feliz Navidad!
Una Riccia aconseja
Las galletas de jengibre se conservan bien en una lata durante un mes.
FAQ (Preguntas y Respuestas)
¿Qué debo hacer si quiero utilizar las galletas de jengibre para decorar el árbol de Navidad?
Antes de meter las galletas en el horno, haz un agujero con una pajita o un palillo en la parte superior de la cabeza para tener un orificio para un lazo. Recuerda que las galletas subirán un poco, así que no lo hagas demasiado pequeño.
¿Qué hago si el glaseado real se vuelve líquido después de poner el colorante?
Puedes añadir un poco de azúcar glas y mezclar de nuevo hasta obtener la consistencia deseada.

