La solución para tus cenas rápidas: ¡la pizza de hojaldre!
¿Quién de nosotros no ha deseado alguna vez una cena deliciosa sin pasar horas en la cocina?
Especialmente cuando la vida es un torbellino de compromisos, carreras contrarreloj y días que parecen no terminar nunca. Pues bien, ¡yo soy una de esas personas! Entre el trabajo, la familia y mil actividades, a veces llegar a la noche y tener que cocinar me parece una misión imposible.
Todavía recuerdo aquella vez que, tras un día interminable, llegué a casa con un hambre rugiente y cero ganas de ponerme a cocinar. La nevera estaba casi vacía, el cansancio me invadía y lo único que deseaba era una comida caliente y sabrosa, ¡pero ya!
Y en ese momento de desaliento, al abrir la despensa, lo vi: ¡el rollo de hojaldre, mi salvador! En pocos minutos, con ingredientes simples y un toque de fantasía, improvisé una pizza de hojaldre que salvó la noche (¡y mi estómago!).
Desde entonces, se ha convertido en mi receta salvacena, perfecta para cuando el tiempo es poco y las ganas de cocinar aún menos.
Hoy quiero compartir con vosotros esta receta fácil y rápida, que os permitirá disfrutar de una pizza deliciosa sin estrés y en muy poco tiempo.
¿Listos para descubrir cómo preparar la pizza de hojaldre más rica que hayáis probado?
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 10 Minutos
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 2
- Métodos de Cocción: Horno eléctrico, Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
- Energía 643,43 (Kcal)
- Carbohidratos 42,88 (g) de los cuales azúcares 0,02 (g)
- Proteínas 17,34 (g)
- Grasa 45,79 (g) de los cuales saturados 26,21 (g)de los cuales insaturados 0,12 (g)
- Fibras 1,02 (g)
- Sodio 483,72 (mg)
Valores indicativos para una ración de 320 g procesada de forma automatizada a partir de la información nutricional disponible en las bases de datos CREA* y FoodData Central**. No se trata de consejos alimentarios y/o nutricionales.
* CREATES Centro de Investigación sobre Alimentación y Nutrición: https://www.crea.gov.it/alimenti-e-nutrizione https://www.alimentinutrizione.it ** Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, Servicio de Investigación Agrícola. FoodData Central, 2019. https://fdc.nal.usda.gov
Ingredientes
- 1 rollo de hojaldre
- 200 g puré de tomate
- 1 mozzarella de búfala
- 1 chorro aceite de oliva virgen extra
- 1 pizca pimienta negra
- c.s. orégano
Herramientas
- 1 Corta pizza
Pasos
Prepara la base y el borde crujiente:
Extiende el rollo de hojaldre sobre una bandeja recubierta con papel de horno. Con los dientes de un tenedor, pincha delicadamente la superficie del hojaldre, evitando los bordes. Este pequeño truco evitará que la masa se infle demasiado al cocinarse.En un bol, vierte el puré de tomate y condiméntalo con un chorro de aceite de oliva virgen extra, una pizca de sal y una pizca de orégano. Mezcla bien para integrar los ingredientes.
Distribuye la salsa de tomate sobre la base del hojaldre, dejando un borde libre de unos 2 cm.
Para un toque gourmet y una textura crujiente irresistible, utiliza otro rollo de hojaldre para crear un borde: corta tiras y colócalas a lo largo del borde de la pizza, presionando ligeramente para que se adhieran.
Hornea la base de la pizza en el horno precalentado a 200°C durante 7-8 minutos. Esto permitirá que el hojaldre comience a cocinarse y adquiera un ligero tono dorado.
Añade la mozzarella y los ingredientes a gusto:
Mientras la base se cocina en el horno, dedícate a la mozzarella.
Corta la mozzarella de búfala en dados y déjala escurrir en un colador para eliminar el exceso de líquido. Este paso es fundamental para evitar que la mozzarella suelte demasiada agua al cocinarse, haciendo que la pizza quede húmeda.
Pasados los 8 minutos, saca la bandeja del horno con cuidado. Distribuye la mozzarella de búfala sobre la base de la pizza, asegurándote de cubrir toda la superficie.
A este punto, libera tu creatividad y añade los ingredientes que prefieras.
Puedes utilizar verduras a la parrilla, embutidos, quesos u cualquier otro ingrediente que tengas en la nevera.
En este caso, yo realmente tenía la nevera vacía y solo añadí unas aceitunas taggiasche deshuesadas, que darán un toque de sabor mediterráneo a mi pizza.
Completa la cocción y disfruta de tu pizza:
Vuelve a colocar la bandeja en el horno y completa la cocción durante otros 10-15 minutos aproximadamente, o hasta que la mozzarella esté completamente derretida y el borde esté dorado y crujiente.
Una vez cocida, saca la pizza del horno y déjala templar un poco antes de cortarla en porciones.
Esto permitirá que la mozzarella se asiente y que los sabores se mezclen de la mejor manera.
Una vez que la pizza se haya templado ligeramente, transfiérela a una tabla de madera.
Con una cortadora de pizza o un cuchillo afilado, divídela en porciones del tamaño deseado. Coloca las porciones en un plato para servir o en platos individuales.
Para un toque de frescura, acompaña la pizza con una ensalada mixta o con verduras de temporada.
Completa todo con tu bebida favorita: una bebida fría, un zumo de frutas o una buena copa de vino. ¡Buen provecho!
Aquí tienes algunos consejos para conservar tu pizza de hojaldre y algunas variantes gustosas para personalizarla:
Conservación: A temperatura ambiente:
Si piensas consumir la pizza en pocas horas después de cocida, puedes conservarla a temperatura ambiente, cubierta con un paño limpio o con papel film. * En el frigorífico: Si te sobran algunas porciones, puedes conservar la pizza en el frigorífico durante 1-2 días. Para evitar que el hojaldre pierda su crujido, te recomiendo envolverla en papel de aluminio o guardarla en un recipiente hermético.
Recalentamiento: Para disfrutar al máximo de la pizza sobrante, recalienta en el horno a 180°C durante unos minutos, o en una sartén con un chorrito de aceite.
Variantes: Pizza blanca: Omite el puré de tomate y crea una pizza blanca con mozzarella, diferentes quesos y verduras a gusto.
Pizza con pesto: Sustituye el puré de tomate por pesto genovés para un toque de sabor ligur.
Pizza dulce: Para una merienda deliciosa o un postre original, unta el hojaldre con Nutella o con mermelada y añade fruta fresca a gusto.
Calzone de hojaldre: Cierra el hojaldre por la mitad, creando un calzone relleno con los ingredientes que prefieras.
Mini pizzetas: Corta el hojaldre con un cortapastas o un vaso para crear mini pizzetas, perfectas para un aperitivo o un buffet.
Consejos extras: Para un hojaldre aún más crujiente, píntalo con una yema de huevo batida antes de hornearlo.
Añade un pizca de azúcar a la salsa de tomate para equilibrar la acidez.
Si utilizas ingredientes congelados, asegúrate de descongelarlos completamente antes de usarlos.
Experimenta con diferentes hierbas aromáticas para personalizar el sabor de tu pizza, como albahaca fresca, romero o tomillo.
Con estos consejos y variantes, ¡tu pizza de hojaldre siempre será un éxito!
Vino para maridar con la pizza de hojaldre:
La elección del vino para tu pizza de hojaldre depende mucho de los ingredientes que hayas utilizado. Aquí tienes algunas ideas generales y luego algunos consejos más específicos:
En general, con el hojaldre combinan bien:
Vinos blancos ligeros y frescos: Pinot Grigio, Vermentino, Sauvignon Blanc.
Su acidez equilibra la riqueza del hojaldre y limpia el paladar.
Espumosos:
Prosecco, Franciacorta, Trento DOC. Las burbujas desengrasan y hacen la comida más vivaz.
Rosados:
Cerasuolo d’Abruzzo, Bardolino Chiaretto. Una opción versátil que se adapta a muchos gustos. Considerando tus ingredientes (mozzarella, aceitunas taggiasche):
Vermentino de Cerdeña: Aromático y sabroso, combina bien con la mozzarella y las aceitunas.
Falanghina: Un blanco campano con notas de fruta y flores, excelente con la mozzarella de búfala.
Lambrusco Grasparossa di Castelvetro: Espumoso y con una ligera nota tánica, combina con las aceitunas y el hojaldre.
Si hubieras añadido otros ingredientes…
Verduras: Sauvignon Blanc, Chardonnay (no demasiado barricado)
Embutidos: Lambrusco di Sorbara, Pinot Nero
Quesos fuertes: Gewürztraminer, Riesling
Un último consejo:
¡No tengas miedo de experimentar!
El maridaje de comida y vino es muy personal, así que prueba diferentes opciones y descubre cuál prefieres.
FAQ (Preguntas y Respuestas)
¿Puedo usar hojaldre congelado?
Sí, puedes utilizar hojaldre congelado, pero asegúrate de descongelarlo completamente antes de usarlo. Déjalo en el frigorífico durante unas horas o a temperatura ambiente durante aproximadamente una hora, siguiendo las instrucciones del paquete.
¿Cómo puedo evitar que el hojaldre se infle demasiado al cocinarse?
Para evitar que el hojaldre se infle excesivamente, pincha la superficie con los dientes de un tenedor antes de añadir el condimento. De este modo, el vapor podrá escapar durante la cocción y la masa permanecerá más plana.

¿Qué puedo usar en lugar de mozzarella?
Si no tienes mozzarella o quieres probar algo diferente, puedes utilizar otros quesos como scamorza, provolone, gorgonzola, fontina o emmental. También puedes añadir una mezcla de quesos para un sabor más rico.
¿Puedo preparar la pizza de hojaldre con anticipación?
Sí, puedes preparar la base de la pizza con la salsa de tomate con anticipación y conservarla en el frigorífico durante unas horas. Añade la mozzarella y los demás ingredientes justo antes de hornearla.
¿Cómo puedo hacer que el hojaldre esté más crujiente?
Para un hojaldre aún más crujiente, píntalo con una yema de huevo batida antes de hornearlo. También puedes añadir un pizca de azúcar a la salsa de tomate para favorecer el dorado.
¿Se puede congelar la pizza de hojaldre?
Sí, puedes congelar la pizza de hojaldre ya cocida. Déjala enfriar completamente, luego envuélvela en papel de aluminio o colócala en un recipiente hermético. Para descongelarla, déjala en el frigorífico durante unas horas y luego caliéntala en el horno.

