Las Berenjenas marinadas en crudo, realmente deliciosas, crujientes y sabrosas, son perfectas para el periodo de verano porque se comen frías, incluso frías de frigorífico. Recomiendo sin embargo, comprar especialmente para los crudos, hortalizas que provengan de agricultura biológica, para evitar todos los residuos dañinos que dejan los productos químicos, utilizados en la agricultura tradicional. Se trata de un acompañamiento tan fantástico, que cuando tengo un poco más de tiempo, hago conservas, así puedo disfrutarlas también en el periodo invernal, sirviéndolas junto a un buen queso curado, un hervido, en fin, con todo lo que se me ocurra. Os aconsejo leer el artículo Conservas hechas en casa, para seguir el procedimiento correcto con total seguridad.
Si os gustan los alimentos marinados, entonces no os perdáis las próximas recetas:
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 2 Horas
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 4 personas
- Métodos de Cocción: Sin cocción
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Verano
Ingredientes
- 600 g berenjena
- 1 diente ajo
- 3 cucharadas vinagre de vino blanco suave
- 4 ramitas menta
- 3 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- c.s. sal
Herramientas
- Mandolina /cuchillo para hortalizas
- Bol
- Film transparente
Preparación
Lavamos las berenjenas, las secamos y las cortamos con una mandolina o con un cuchillo afilado. Las rodajas no deben ser más gruesas de 3 milímetros.
En este punto las cortamos en tiras, una especie de juliana, y las colocamos en un bol grande y con bordes altos, porque las berenjenas van a producir bastante volumen.
Las condimentamos con una pizca de sal y el vinagre, pero lo probamos antes porque si resulta ser muy fuerte, ponemos menos.
Mezclamos bien, cubrimos el bol con el film transparente y dejamos reposar en el frigorífico durante al menos dos horas.
De vez en cuando las removemos, para que se sazonen de manera uniforme.
Pasado el tiempo de reposo, tomamos los filetes de berenjena entre las manos y los exprimimos bien, para que pierdan la mayor cantidad de agua posible.
Ahora solo nos queda colocarlas en una bandeja de servir y rociarlas con el aceite de oliva virgen extra.
Añadimos también el ajo cortado en láminas, la sal, y por último unimos también las hojas de menta frescas, después de haberlas lavado con cuidado y secado.
Mezclamos bien todos los ingredientes y llevamos a la mesa.
Servimos vuestras Berenjenas marinadas en crudo, como acompañamiento de un plato principal o como entrante, tanto frías como a temperatura ambiente.
Consejos y conservación:
Si no te gusta el vinagre de vino blanco, puedes optar por el de manzana, pero también el balsámico irá igualmente bien, solo resultarán más oscuras.
Puedes conservar las berenjenas marinadas durante algunos días en el frigorífico, pero dentro de recipientes de vidrio o cerámica con cierre hermético.
Para una conservación más prolongada, puedes envasarlas y cocinarlas al baño maría.
