Normalmente estoy acostumbrada a cocinar siguiendo la tradición ligur que abunda en platos a base de pescado y que utiliza principalmente el aceite, una pasada en sartén y listo.

Adoro también platos más golosos, ricos en queso, panceta o mantequilla, digamos que, en toda honestidad, quienes nunca han sido los protagonistas en mi recetario son las verduras que rara vez asoman en el frigorífico.

Con el tiempo, sin embargo, he comenzado a interesarme por las recetas de temporada, incluso vegetarianas o a base de verduras, así que me he lanzado a preparar risottos de calabaza, sopas de legumbres, pasta con brócoli y muchas otras preparaciones sabrosas y nunca banales.

Ahora, en la temporada invernal, el repollo y la col son los protagonistas, así que decidí preparar un plato a base de estas verduras enriquecido con una sabrosa y deliciosa salchicha.

El resultado fue maravilloso y en casa hubo una ovación de pie, sinceramente no pensaba que una col me daría tanta satisfacción.

En esta receta facilísima de la col con salchicha en sartén, seguiremos un procedimiento de cocción que dará a la col un delicado sabor agridulce, similar al de la col fermentada, para luego pasarla en sartén, sazonarla y finalmente guisarla hasta que se vuelva blanda y ligeramente dorada.

El resultado será una guarnición agridulce perfecta para acompañar las salchichas de cerdo: la col aligera la carne de cerdo que, a su vez, sazona la col.

Sírvela caliente con un poco de mostaza y acompáñala con crutones de pan o de polenta asados y se convertirá en un plato único sabroso y sustancioso ideal en invierno cuando las temperaturas bajan.