¿Tienes ganas de una buena pizza hecha en casa, pero no tienes ni amasadora ni herramientas complicadas? ¡Entonces estás en el lugar correcto! En esta receta te mostraré cómo hacer una masa para pizza fácil a mano, perfecta incluso para principiantes.
Con ingredientes simples, una fermentación lenta y un poco de paciencia, obtendrás una pizza ligera, bien alveolada y de sabor auténtico. Ideal para una cena en familia o con amigos, para aderezar como más te guste.
Ya sea que tengas un horno para pizza, piedras refractarias o un horno normal en casa, esta receta se adapta perfectamente y el resultado te sorprenderá!
- Dificultad: Fácil
- Costo: Muy económico
- Tiempo de reposo: 8 Horas
- Tiempo de preparación: 5 Minutos
- Porciones: 5Piezas
- Métodos de Cocción: Horno eléctrico
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes
- 350 g harina 0 (W 260/280 Caputo Nuvola)
- 150 g harina 00 (W 260 / 270 Caputo Pizzeria)
- 350 ml agua
- 3 g levadura fresca
- 2 cucharadas aceite de oliva virgen extra (para la pizza y para engrasar los cuencos)
- 1 cucharadita sal
- c.n. harina de sémola
Herramientas
- 1 Cuenco
- 1 Cuchara de madera
- 1 Horno para pizza Ariete
- 1 pala para pizza deslizante
- 5 Cuencos
Pasos
Prepara todos los ingredientes en la mesa de trabajo.
Pon la sal en un vaso, añade un poco de agua (tomada de los 350 ml) y disuélvela.
Disuelve la levadura en el agua restante. Asegúrate de que el agua esté fría o a temperatura ambiente.
Vierte la harina en un cuenco.
Añade el agua con la levadura y comienza a mezclar con una cuchara de madera.
Añade el aceite de oliva virgen extra y posteriormente el agua con la sal.
Una vez recogida la masa, amasa a mano durante unos minutos.
Cubre la masa con una tapa. Si hace calor, ponla en el frigorífico, de lo contrario déjala reposar sobre la mesa de trabajo durante 15 minutos.
Retoma la masa y amasa a mano durante unos minutos.
Cubre y deja fermentar.
Nota importante: Puedes preparar la masa por la noche para el día siguiente, o por la mañana para la noche.
Saca la masa del frigorífico 8 horas antes de hornearla para que fermente a temperatura ambiente.
Después de 4-5 horas, forma los bollos.
Espolvorea la masa con harina (también sirve la harina 00).
Gira el cuenco y despega la masa con cuidado, añadiendo más harina si es necesario.
Retira 5 bollos de tamaño similar (o 4 para pizzas más grandes, pero no recomendado para hornos de pizza).
Pon los bollos en cuencos engrasados con aceite para que fermenten.
Una vez fermentados los bollos, están listos para ser estirados.
Enciende el horno para pizza a máxima potencia o el horno de casa con piedras refractarias a 250°C.
Espolvorea la mesa de trabajo con abundante harina de sémola.
Voltea el bollo, empanízalo y estíralo suavemente desde la parte alta.
Transfiere la pizza a la pala de acero, asegurándote de que esté bien «empanada» de harina. Retira el exceso de harina.
Si usas una pala deslizante, mueve la masa desde la harina de sémola, adereza y luego toma la pizza con la pala deslizante para hornearla.
Hornea la pizza: En el horno de casa con piedras refractarias: cocina durante 6-7 minutos.
En el horno para pizza: cocina durante 3-4 minutos para un resultado excepcional.
Con estos sencillos pasos, tendrás una masa de pizza hecha a mano perfecta, lista para ser cocida y disfrutada. El secreto está en la fermentación lenta y en la preparación cuidadosa de los bollos, que te garantizarán una pizza ligera y bien fermentada. Recuerda, la calidad de los ingredientes y el tiempo de fermentación son fundamentales para obtener un resultado excelente. ¡Diviértete en la preparación y buen provecho!
Consejos y notas
Harinas mixtas: Para un sabor más rústico, puedes sustituir una parte de la harina 00 por harina integral o de espelta. Esto añade un sabor más intenso y una mayor cantidad de fibra.
Hidratación variable: Ajustar la cantidad de agua según la humedad de la harina puede influir en la consistencia de la masa. Una masa más hidratada tiende a ser más suave y alveolada.
Pizza ya cocida: Si tienes rodajas sobrantes, puedes guardarlas en un recipiente hermético en el frigorífico durante 1-2 días. Para recalentarla, ponla en el horno a 180°C durante unos minutos para mantener la crujientez.
Harinas mixtas: Para un sabor más rústico, puedes sustituir una parte de la harina 00 por harina integral o de espelta. Esto añade un sabor más intenso y una mayor cantidad de fibra.
Hidratación variable: Ajustar la cantidad de agua según la humedad de la harina puede influir en la consistencia de la masa. Una masa más hidratada tiende a ser más suave y alveolada.
Pizza ya cocida: Si tienes rodajas sobrantes, puedes guardarlas en un recipiente hermético en el frigorífico durante 1-2 días. Para recalentarla, ponla en el horno a 180°C durante unos minutos para mantener la crujientez.
La temperatura del horno es crucial para una buena cocción. Asegúrate de que esté bien caliente antes de hornear la pizza.
Experimentos
Últimamente, ante la falta de harina Caputo Nuvola en mi despensa, he usado un 80% de harina Pizzeria y un 20% de harina Caputo Aria que tenía. También en este caso la pizza salió perfecta.
FAQ (Preguntas y Respuestas)
Mi masa está demasiado pegajosa, ¿qué puedo hacer?
Si la masa está muy pegajosa, puedes añadir un poco de harina durante el amasado. Sin embargo, ten cuidado de no exagerar, de lo contrario la masa se volverá demasiado seca y menos esponjosa después de hornearla.
¿Puedo dejar fermentar la masa por más de 8 horas?
¡Sí! Una fermentación más larga, hasta 24 horas en el frigorífico, mejora la digestibilidad y el sabor de la pizza. Solo recuerda aclimatar la masa a temperatura ambiente antes de formar los bollos.
No tengo un horno para pizza, ¿puedo usar el horno de casa?
¡Absolutamente sí! Para obtener una buena cocción en el horno de casa, usa la piedra refractaria y ajusta la temperatura lo más alta posible (250°C). Deja que la piedra se caliente durante al menos 30-40 minutos antes de hornear.
¿Cómo puedo conservar la masa sobrante?
Puedes conservar la masa en el frigorífico durante un máximo de 24-48 horas, bien cubierta con film o en un recipiente hermético. Alternativamente, puedes congelarla inmediatamente después de la fermentación y descongelarla en el frigorífico el día antes de usarla.
Mi pizza no sale crujiente, ¿qué estoy haciendo mal?
La crujientez depende de varios factores:
– La temperatura del horno debe ser muy alta.
– Si usas el horno de casa, cocina sobre la piedra refractaria bien caliente.
– No exageres con el aderezo: demasiados líquidos pueden hacer que la base quede blanda.¿Puedo hacer esta masa con la amasadora?
Sí, puedes amasar con la amasadora usando el gancho amasador. Trabájala a velocidad media-baja hasta obtener una masa lisa y elástica. Sin embargo, ¡esta receta está pensada justamente para quienes quieren amasar a mano!
¿Cuál es el mejor método para recalentar la pizza sobrante?
La mejor manera es hornearla a 180°C durante unos 5 minutos, o calentarla en una sartén con tapa para mantener la base crujiente. Evita el microondas, ya que hace que la pizza quede blanda.

