TARTA DE ZANAHORIA
Una TARTA DE ZANAHORIA tradicional suave y ligeramente húmeda, sin mantequilla que se prepara en pocos minutos, un clásico dulce de despensa perfecto para el desayuno o para una merienda saludable.
Entre mis recetas más queridas seguramente se encuentra esta, una preparación simple que me recuerda cuando era niña y no existían muchas meriendas, y el descubrimiento de las maravillosas “Camille” que no podía dejar de comer.
Mi mamá sin embargo, amante de la cocina saludable, prefería hacerlas en casa y a fuerza de experimentaciones había encontrado esta receta de la Tarta con Zanahorias que a mi parecer es perfecta.
Rapidísima y práctica se prepara en 15 minutos: una vez trituradas las zanahorias crudas con la cáscara de limón o de naranja se mezclarán directamente en un bol junto a los otros ingredientes y en pocos segundos, la Tarta de zanahorias podrá ser horneada.
¿El resultado? Un dulce de consistencia suave, aterciopelada y ligeramente húmeda, gracias a las zanahorias puestas en crudo, sin mantequilla, de color brillante, perfecta en su sencillez.
Pero si lo prefieres, puedes enriquecerla con la típica glasa de queso de la Carrot cake, la famosa tarta americana, una tarta en capas alternadas con un Frosting de queso.
Esta Tarta de Zanahorias es ideal para todas las ocasiones: desde el desayuno hasta una merienda genuina; para llevarla en la mochila del colegio, en la oficina para empezar el día con energía y sabor, estoy segura de que si la pruebas no la dejarás más.
Con la misma receta puedes realizarla también en forma de porciones individuales para imitar las míticas meriendas Camille o preparar la TARTA DE CALABAZA, sustituyendo simplemente las zanahorias crudas con calabaza cruda en las mismas cantidades y procediendo de la misma manera.
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