Dátiles rellenos de crema de mascarpone y limoncello sin cocción y cubiertos de chocolate blanco.

La crema de mascarpone y limoncello me ha dado muchas satisfacciones últimamente, porque, además de ser fácil y rápida de hacer, no requiere cocción u otros ingredientes particulares.

Es excelente para rellenos porque no gotea, pero si la quieres más suave puedes añadir un par de cucharadas más de leche.

No bebiendo limoncello y teniendo aún que consumir una buena botella, últimamente lo estoy utilizando con buenos resultados en recetas dulces y saladas, siempre fáciles y rápidas de realizar.

Los dátiles rellenos serán un delicioso fin de comida o una idea de regalo bonita, para preparar en pocos minutos.

Seguramente te sobrará crema que podrás utilizar para hacer copas de pandoro o panettone, colocando rodajas en capas y mojándolas como prefieras.

Descubre conmigo cómo realizarlos y si buscas ideas para hacer tus festividades más deliciosas, aquí abajo te dejo algunas pequeñas ideas de las que puedes inspirarte.

Dificultad: Muy fácil
Costo: Económico
Tiempo de reposo: 1 Hora
Tiempo de preparación: 30 Minutos
Porciones: 30 dátiles aproximadamente
Métodos de Cocción: Microondas
Cocina: Italiana
Estacionalidad: Navidad

Ingredientes

250 g mascarpone
4 cucharadas leche
2 cucharadas limoncello
20 g azúcar glas
c.s. ralladura de limón
30 dátiles (deshuesados)
60 g chocolate blanco

Herramientas

1 Bol
1 Batidor
1 Espátula
1 Rallador

Pasos

Para hacer los Dátiles rellenos de crema de mascarpone, primero prepara la crema de mascarpone.
En un bol trabaja con las batidoras eléctricas el mascarpone con el azúcar glas.
Añade el limoncello, la leche y sigue trabajando con la ayuda de una espátula.
Ralla la cáscara de un limón no tratado y mezcla nuevamente.
Reserva en el frigorífico.
Si no están deshuesados, elimina el hueso de los dátiles haciendo una ligera incisión en un lado del dátil y extrayendo el hueso con cuidado.
Rellena cada dátil con la ayuda de una cucharita y reserva hasta terminar con todos los dátiles.
Derrite el chocolate en el microondas o al baño maría. Sumerge los dátiles y luego escurre el exceso de chocolate.
Deja reposar en el frigorífico sobre papel de horno, separando los dátiles, hasta el momento de servirlos.