La pasta fría vegetariana es un primer plato muy colorido y sabroso, facilísimo, ligero y versátil, para personalizar de vez en cuando, según lo que más nos guste o lo que ya tengamos en la nevera. Podemos usar todo tipo de pasta corta, en particular una pasta rugosa, rayada o en espiral, para que retenga y envuelva el condimento. Podemos añadir otros ingredientes para hacer la pasta fría aún más rica, como aguacate, judías verdes, tomatitos; o bien atún, queso, etc. Gracias a su ligereza, la pasta fría vegetariana se puede disfrutar también en la cena o como tentempié en el trabajo.

- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Medio
- Tiempo de reposo: 1 Hora
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: 3
- Métodos de Cocción: Fogón
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Primavera, Primavera, Verano
Ingredientes
- 250 g pasta corta
- 1 calabacín
- 250 g espárragos
- 1 pimiento
- 1 tallo apio blanco
- c.s. aceitunas negras (deshuesadas)
- c.s. aceite de oliva virgen extra
- c.s. zumo de limón o vinagre de manzana
- c.s. sal fina
Preparación
Ponemos a calentar agua en una olla grande.
Mientras tanto, lavamos todas las verduras, quitamos las partes de desecho y las cortamos en daditos.
Cuando el agua hierva, la salamos, esperamos que vuelva a hervir e introducimos las verduras (excepto el apio y las aceitunas). Las dejamos cocinar por un máximo de 5 minutos, las escurrimos y las trasladamos a un bol grande. Vertemos la pasta en el agua hirviendo. Cocemos la pasta muy al dente, la escurrimos y la unimos a las verduras. Mezclamos y dejamos que se temple durante unos veinte minutos.
Finalmente, condimentamos la pasta con las aceitunas deshuesadas, los daditos de apio y todas las demás verduras. Ajustamos de sal fina, aceite de oliva virgen extra y zumo de limón o vinagre de manzana según los gustos. Mezclamos bien; la pasta fría vegetariana está lista. Cubrimos y dejamos que se insaporice antes de disfrutarla.