La focaccia blanca con aceite e.v.o. es un pan simple de sémola remolinada que le da el aspecto dorado, aceite, agua y sal.
Es una focaccia base suave y alta, perfecta como sustituta del pan o rellena con embutidos y quesos.
Su aroma envuelve toda la cocina, es tan buena, suave y fragante, especialmente cuando está caliente y recién horneada, esta masa tan simple es muy apreciada incluso por los niños.
En mi casa la preparo a menudo con muchísimas variaciones y cada vez queda la bandeja vacía.
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- Dificultad: Muy fácil
- Tiempo de reposo: 3 Horas
- Tiempo de preparación: 15 Minutos
- Porciones: 6
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
Ingredientes para la focaccia blanca con aceite e.v.o.
- 500 g harina de sémola de trigo duro remolinada (aproximadamente)
- 8 g levadura fresca
- 250 ml agua
- 50 ml aceite de oliva
- 1 cucharadita sal
Herramientas
- Amasadora
- Bandeja
- Horno
Preparación para la focaccia blanca con aceite e.v.o.
En una amasadora o bol a mano disolvéis la levadura en el agua, añadís el aceite y poco a poco toda la harina, amasáis bien, luego al final añadís la sal, trabajáis bien la masa durante algunos minutos hasta que esté bien integrada.
Dejad que la masa leude en el bol o en el mismo recipiente de la amasadora, cubierto con un paño.
Después de aproximadamente 2 – 3 horas, dependiendo de la temperatura que tengáis en casa, debe haber doblado su tamaño.Engrasad una bandeja con aceite, con las manos untadas en aceite, porque la masa es bastante suave, colocad la masa en la bandeja extendiéndola con las manos y pinchando la superficie.
Dejad que leude otra vez durante menos de una hora en un lugar cálido hasta que llegue al borde de la bandeja.
Con la punta de los dedos haz agujeros en la masa, luego llévala al horno caliente.Hornead la focaccia blanca con aceite e.v.o. en horno ya precalentado a 250° ventilado durante unos 20-25 minutos, dependiendo de la potencia de vuestro horno.
Cuando la focaccia tenga ese bonito aspecto dorado, sacadla del horno.Una vez cocida, pincelad la superficie con aceite e.v.o. además de hacerla más suave, también le da un toque extra de sabor.
Cortad la focaccia y servidla sola o acompañada o rellena de otra cosa.
Consejos y variaciones
Una vez cocida, la focaccia se puede abrir por la mitad y rellenar con lo que más te guste. ¡Podéis, por ejemplo, untar queso o rellenar con jamón crudo o cocido!
La focaccia blanca se conserva durante 1-2 días en una bolsa de papel.
Se puede congelar una vez cocida y dejada enfriar para luego descongelarla y calentarla cuando sea necesario.