Preparación

• Para la preparación de los rollitos empezamos a preparar el relleno, entonces monta a punto de nieve la nata. Para hacer esta operación es recomendable utilizar nata bien fría y poner durante media hora en el congelador las varillas y el bol donde se va a montar la nata. De esta manera, el resultado será realmente perfecto y tu nata montará más fácilmente.
  
  Vierte la nata en un recipiente bien frío y empieza a trabajar con las varillas, añade también el azúcar glas, en las cantidades que prefieras en base a cuánto quieras endulzarla teniendo en cuenta que también deberás añadir la nutella, que ya es muy dulce, por eso yo añadí solo 2 cucharadas, monta durante unos 8/10 minutos hasta que quede bien firme. Añade entonces también la nutella y sigue trabajando durante algunos segundos más, finalmente el cacao amargo tamizado y trabaja de nuevo hasta que obtengas un resultado perfectamente homogéneo.

• Corta tres rebanadas de la parte central del pandoro y colócalas sobre una hoja de papel de horno o de film transparente, procura superponer las rebanadas de manera que formen un rectángulo, luego aplánalas un poco con la ayuda de un rodillo.
  
  Vierte y extiende el relleno de nata con nutella y cacao, enrolla y cierra con la ayuda del papel de horno o film, aprieta bien los extremos para formar un rollo.
  
  Deja enfriar en el frigorífico durante al menos 4 horas o dos horas en el congelador.

  

• Transcurrido el tiempo de enfriamiento, saca el rollo del congelador, córtalo en rebanadas de unos 3 cm de grosor y colócalas en un plato de servir.
  
  Derrite chocolate negro y con una jeringa o una cucharita repasa hilos sobre cada rollito, deja enfriar de nuevo y espolvorea con azúcar glas antes de servir.

• Variantes: el mismo procedimiento lo puedes hacer usando rebanadas de panettone, para un relleno más rápido puedes sustituir la nata con mascarpone, o rellenar solo con nutella o con otro a tu gusto, incluso con mermelada simple.

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