CÓMO HACER SALSA TZATZIKI

Confieso que hace unos años, la primera vez que probé el Tzatziki, era un poco reticente a la idea de que fuera una salsa salada preparada con yogur y pepinos, que a decir verdad no me vuelven loca, pero me tuve que retractar y desde entonces no he podido prescindir de ella.

Siempre la había comprado ya hecha en el supermercado, de diferentes marcas, a veces más rica, otras menos, pero nunca como la que había probado en vacaciones.

Finalmente conseguí encontrar las proporciones adecuadas para preparar en casa la Salsa Tzatziki, ¡a mi parecer perfecta!

Una receta muy rápida y fácil para la cual necesitarás: yogur griego, pepinos, ajo, jugo de limón o vinagre blanco, sal y aceite de oliva virgen extra, una delicia realmente única que ha convertido al Tzatziki en uno de los símbolos culinarios de Grecia.

Como cualquier receta de tradición, existen diversas variantes, la que prepararemos hoy es la más simple y clásica que luego, según tus gustos, podrás modificar, por ejemplo, aumentando o disminuyendo la cantidad de pepinos.

Antes de comenzar, algunas pequeñas recomendaciones: utiliza yogur griego blanco entero colado y no el yogur clásico (el italiano para entendernos) porque es demasiado líquido; ralla los pepinos por el lado del rallador con los agujeros grandes y sobre todo estrújalos o ponlos a escurrir para que pierdan el exceso de líquido. Esto te permitirá obtener una salsa espesa y cremosa y no líquida.

Una vez listo el Tzatziki, podrás usarlo de mil maneras: es perfecto para la hora del aperitivo para servir con crudités de verduras o untado sobre tostadas, excelente para rellenar bocadillos en lugar de mayonesa, para acompañar segundos platos tanto de carne como de pescado o para aliñar la ensalada de manera ligera en lugar del aceite.

Créeme, si no lo has hecho aún, pruébalo y estoy segura de que te enamorarás de él. También te dejo las recetas de otras salsas de acompañamiento perfectas para la hora del aperitivo y mucho más.