Preparación

• Arroz integral
  Enjuaga el arroz para eliminar parcialmente el almidón, luego:
  • pon el arroz en remojo en un bol, en agua fría, durante 2 horas;
  • remueve de vez en cuando;
  • cambia el agua un par de veces;
  • enjuágalo bien bajo agua corriente antes de usar.
  Completado el proceso de desamidación, escurre bien el arroz vertiéndolo en un colador.

  Si pruebas un grano, tendrás la sensación de estar comiendo un arroz que ha experimentado una primera cocción.

  Si utilizas el arroz basmati reduce los tiempos de remojo de 2 horas a 30 minutos.

  

• En una olla lleva a ebullición el agua salada necesaria para cocinar el arroz.
  Vierte el arroz integral en la olla.
  Cocina el arroz durante 3-5 minutos según la consistencia deseada, enjuágalo bajo agua corriente y escúrrelo bien.

• 

• Prepara los garbanzos siguiendo el procedimiento descrito en cocinar los garbanzos en olla a presión o, si ya los tienes listos en el congelador, descongela una doble porción.

• En un vaso medidor, vierte:
  • 100 ml de agua;
  • caldo vegetal;
  y mezcla para disolver el caldo obteniendo un caldo vegetal.

  En una cazuela añade algunos tallos de perejil para dar sabor y las especias, entonces:
  • cúrcuma en polvo;
  • pimentón ahumado en polvo;
  • pimienta mixta en granos recién molida;
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  • un par de guindillas secas picantes enteras;
  y calienta a fuego bajo.

  Vierte en la cazuela con las especias el caldo vegetal y lleva a ebullición.

• Con unas pinzas de cocina, retira los tallos de perejil y las guindillas enteras.

  Añade los garbanzos e incorpóralos mezclando con una espátula de silicona.

  Colorea la sopa de garbanzos con un par de cucharadas de salsa de tomate. 
  Ajusta de sal y muele la pimienta.

• Deja hervir a fuego bajo hasta que la sopa de garbanzos haya alcanzado la consistencia deseada.

  A fuego apagado, machaca parte de los garbanzos con un tenedor o si prefieres bate con una batidora de mano.

  Cubre con 100 ml de agua [para evitar que la crema de garbanzos se espese].

  Al momento de servir, incorpora el agua a la crema de garbanzos, lleva a ebullición de nuevo y mezcla hasta que vuelva a tomar consistencia.

• Emplata.
  Puedes añadir pimiento crujiente desmenuzado o apio en trozos.
  Añade un hilo de aceite en crudo, las hojitas de albahaca y muele la pimienta.

  Tu dahl de garbanzos sin leche de coco está listo.

  ¡Buen provecho!

• Sírvelo con:
  • arroz basmati al azafrán light;
  • pan sin levadura en sartén delgado y crujiente.

• La combinación con pasta, arroz u otros cereales permite absorber mejor las proteínas de las legumbres.
  Los cereales incluidos en estos platos, de hecho, compensan los aminoácidos faltantes en las legumbres, permitiendo obtener un conjunto completo de aminoácidos.
  Elige cereales preferiblemente integrales.
  Para profundizar: cómo combinar las legumbres en la dieta.