Pasos para hacer el CHEESECAKE KINDER BUENO

• Primero, en un mixer pon las galletas y los tres kinder bueno; tritura todo hasta desmenuzarlos uniformemente.

  Pon en un bol las galletas trituradas junto con los kinder bueno y añade la mantequilla derretida ligeramente templada; mezcla bien todo.

  Transfiere la mezcla así obtenida en un molde desmontable de 20 cm de diámetro y cubierto en el fondo con papel de horno; distribúyelos de modo que formen una base uniforme y compacta ligeramente con el dorso de una cuchara.

  Pon en el congelador justo el tiempo necesario para preparar la crema que verterás encima.

• Pasa a la preparación de la crema de queso: en un bol grande pon el mascarpone (o philadelphia) y la crema de avellanas.

  Con las varillas eléctricas a la mínima potencia, mezcla los dos ingredientes para obtener una crema de color homogéneo.

• En otro bol, con las varillas limpias y a máxima potencia, monta la nata fresca líquida fría de nevera (muy importante, por favor) y, una vez montada, añade el azúcar glas, mezclando nuevamente, esta vez con las varillas a mínima potencia.

• A este punto puedes incorporar la nata vertiéndola en el bol de la crema obtenida anteriormente, y mezcla todo siempre con las varillas eléctricas al mínimo, hasta que obtengas una mezcla bien espumosa y homogénea (imposible no probarla 😉 )

• Recupera del congelador el molde con la base de galletas y viértela crema obtenida.

  Nivélala y pon en el congelador mientras realizas el siguiente paso.

• Para realizar la ganache de chocolate que verterás sobre la superficie de tu cheesecake Kinder Bueno, en un cazo calienta 100 ml de nata fresca líquida y antes de que llegue a ebullición, añade poco a poco los trozos de chocolate con leche.

  Mezcla continuamente con una espátula o cuchara, manteniendo el fuego al mínimo, y retira del fuego apenas veas que el chocolate esté prácticamente todo derretido y bien amalgamado con la nata.

  Continúa mezclando fuera del fuego por unos segundos y deja templar unos minutos.

• Saca del congelador el molde y vierte sobre la superficie del cheesecake la ganache de chocolate.

  Pon en el congelador durante el tiempo del próximo paso.

• Como último paso, funde 50 g de chocolate negro en un cazo (el más pequeño que tengas) y, una vez fundido completamente y dejado templar por alrededor de un minuto, puedes decidir si verterlo en una manga pastelera de las desechables y hacer un pequeño agujero con las tijeras, o alternativamente usar una cuchara para un resultado menos preciso pero más rápido.

  Decora la superficie de tu cheesecake Kinder Bueno haciendo ondas finas de chocolate negro, que recrean el efecto de las que decoran precisamente los Kinder Bueno 😉

  Si quieres, puedes utilizar como hice yo el Kinder Bueno que te ha sobrado para decorar aún más tu cheesecake.

• Pon en el congelador por alrededor de una hora, luego en frigorífico hasta cuando quieras disfrutarla.

  ¡Prueba y déjate seducir por la bondad!