Esta tarta de chocolate con corazón blando es realmente espectacular, ¡difícil que no se convierta en tu tarta de chocolate favorita!
Se trata de una tarta de chocolate a base de ricotta, super esponjosa y húmeda, dentro de la cual, al cortarla, encontrarás un corazón cremosísimo de chocolate negro (aunque también puede ser con leche) que no es más que una ganache de chocolate compuesta por partes iguales de nata fresca líquida y chocolate fundido.
Precisamente por la presencia de una generosa cantidad de chocolate, esta receta es realmente la ideal también para dar nueva vida y forma a cualquier chocolate sobrante que tengas en la despensa, que puede ser tanto negro como con leche, ¡incluso, obviamente, el de los huevos de Pascua!
Para que lo entiendas mejor, se podría decir que es la versión maxi del pastelito de chocolate con corazón caliente.
Mi consejo para esta maravillosa tarta es, como verás, dejarla templar antes de proceder a cortarla, pero nada te impide cortarla aún muy caliente para que la consistencia del corazón de chocolate sea aún más líquida.
¡Pruébala y cuéntame, además porque es realmente muy fácil de preparar!
A continuación encontrarás la receta explicada en detalle paso a paso y también el VIDEO COMPLETO, como en muchas de mis recetas.
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- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 20 Minutos
- Porciones: raciones para molde desmontable de 22 cm
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes para preparar la TARTA DE CHOCOLATE CON CORAZÓN BLANDO
- 3 huevos (fríos)
- 170 g azúcar
- 200 g ricotta
- 50 g aceite de semillas (yo utilizo el de girasol)
- 40 g cacao amargo en polvo (de buena calidad)
- 150 g harina 00
- 1 sobre levadura en polvo para dulces
- 150 ml nata fresca líquida
- 150 g chocolate (negro o también con leche)
Herramientas para preparar la TARTA DE CHOCOLATE CON CORAZÓN BLANDO
- Molde para tarta desmontable de 22 cm
- Batidora eléctrica
Pasos para preparar la TARTA DE CHOCOLATE CON CORAZÓN BLANDO
Comienza preparando la ganache de chocolate; puedes utilizar tanto chocolate negro (yo utilizo para esta receta un chocolate con cacao máximo al 50 %) como también chocolate con leche, obviamente incluidas las huevos de Pascua si no tienes ideas de cómo transformarlas en algo aún más delicioso).
En caso de optar por el chocolate con leche, el corazón blando será obviamente un poco más dulce, pero siendo la tarta elaborada con cacao amargo, el conjunto no resultará excesivamente dulce en absoluto, al contrario.
En un cazo preferiblemente antiadherente vierte la nata fresca líquida, caliéntala y apaga el fuego en el momento en que alcance el primer hervor.
Vierte en el cazo todo el chocolate, previamente picado toscamente. Mezcla con una batidor manual hasta que el chocolate esté completamente derretido e integrado con la nata. Vierte la ganache de chocolate así obtenida en un bol y resérvala, mientras tanto comienza a preparar la tarta de chocolate.
En un bol grande rompe los huevos (por favor, mucho mejor si están fríos de la nevera) y el azúcar, luego enciende las batidoras eléctricas a media potencia y bate durante aproximadamente medio minuto; no es necesario batir los huevos y el azúcar durante más tiempo, es más, para esta receta podría ser un paso contraproducente.
Agrega gradualmente también el aceite e incorpóralo completamente siempre con las batidoras, que de ahora en adelante deberás encender siempre a la mínima potencia.
Una vez incorporado bien el aceite de semillas, agrega la ricotta y mezcla de nuevo, siempre hasta que notes que la mezcla ha vuelto a ser homogénea.
Agrega ahora el cacao amargo en polvo, todo de una vez, y bate, recogiendo con las batidoras el cacao poco a poco para no hacer un polvorón 😉
Una vez incorporado todo el cacao pasa a la harina: agrégala poco a poco.
Finalmente, añade la levadura para dulces, mejor si tamizada para evitar desigualdades en la levadura durante la cocción.
Toma el molde desmontable de 22 cm y cubre la base con papel de horno, luego vierte aproximadamente la mitad de la masa de la tarta y distribúyela uniformemente sobre la base del molde.
Hecho esto, toma la ganache que habías reservado y viértela toda sobre la base que has creado con la masa de la tarta.
Algo muy importante: vierte la ganache de chocolate dejando un espacio de aproximadamente dos-tres centímetros vacío respecto al borde del molde, evitando así al máximo que la ganache entre en contacto con este último durante la cocción; no pasaría nada irreparable, pero es preferible que en contacto con el molde quede solo la masa de la tarta.
Solo te queda verter la parte de la masa restante, comenzando por los bordes y nivelando lo mejor posible.
Ahora tu tarta de chocolate con corazón blando está lista para ser horneada; el horno aconsejo estático a 175 grados durante aproximadamente 35 minutos.
Haz siempre la prueba del palillo de madera para verificar la cocción, deberá salir seco.
¡Y aquí tienes tu TARTA DE CHOCOLATE CON CORAZÓN BLANDO en toda su ‘deliciosidad’!
Te recomiendo dejarla templar 30-40 minutos antes de cortar una porción, pero si deseas el corazón blando aún caliente y derretido, también puedes disfrutarla de inmediato.
Conservación y variantes
La tarta de chocolate con corazón blando se conserva unos dos días cubierta con una campana de vidrio o plástico.
Como te decía en la introducción, para la ganache de chocolate podrás utilizar el chocolate que tengas a disposición, ya sea con leche, negro, o incluso un poco de negro y un poco con leche.
Si deseas transformar esta tarta en una clásica tarta de chocolate, muy esponjosa y húmeda, solo necesitas saltar el paso de la ganache y, si lo deseas, añadir a la masa antes de verterla en el molde algunas chispas de chocolate (encuentra la receta haciendo clic AQUÍ)
