La focaccia fácil suave y con burbujas es una delicia muy sencilla de preparar. Perfecta para ser cortada a la mitad y rellenada, esta focaccia es probablemente la favorita en mi casa ya que mi familia metería cualquier cosa entre dos rebanadas de pan. Es una focaccia muy hidratada, pero no temas, no hay mucho trabajo, de hecho, basta con mezclar con una cuchara y dejar reposar. La harina irá absorbiendo el agua y todo el trabajo lo hace la levadura. La he preparado con levadura de cerveza, sí, sé que soy una fanática de la masa madre, pero entre mis mil experimentos también probé esto. Claro que se puede hacer también con un poco de levadura madre: bastarán 50 gr por kg de harina y la fermentación lenta producirá una focaccia increíble, pero te darás cuenta por ti mismo. No nos queda más que ponernos manos a la obra y preparar juntos la focaccia fácil suave y con burbujas.
¡Si te gustan las focaccias te dejo algunas ideas!
- Dificultad: Fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de reposo: 4 Horas
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 8 personas
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
- Estacionalidad: Todas las estaciones
Ingredientes para la preparación de la focaccia fácil suave y con burbujas
- Medio kg harina 0 (13 % proteínas)
- 400 ml agua
- 8 g levadura de cerveza fresca
- 15 g sal
- 3 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 5 cucharadas agua
- c.s. sal gruesa
- c.s. romero (opcional)
Herramientas
- Horno
- Bandeja ( de horno )
Preparación de la focaccia fácil suave y con burbujas
En un bol disolvemos la levadura de cerveza en 400 ml de agua. Añadimos la harina tamizada y comenzamos a mezclar con una cuchara. Añadimos la sal trabajando con la cuchara hasta obtener una masa homogénea. Cubre con el aceite y con film transparente y dejamos reposar una hora y media aproximadamente.
Pasado el tiempo de reposo, hacemos pliegues en el bol como lees en este artículo o viendo el vídeo. Dejamos reposar 30 minutos.
Repetimos vueltas de pliegues en la mesa de trabajo y dejamos fermentar cubriendo la masa. Engrasamos bien una bandeja del horno o la forramos con papel de horno. Colocamos la masa en la bandeja extendiéndola con las yemas de los dedos y dejamos fermentar nuevamente unos 30 minutos. Cuando esté bien fermentada, vertemos una emulsión de agua y aceite y terminamos la extensión con las yemas de los dedos. Añadimos una pizca de sal gruesa y perfumamos con romero si te gusta. Precalentamos el horno estático a 200°C, horneamos y cocinamos durante unos 15 minutos en la parte baja del horno. Movemos a media altura del horno durante otros 10 minutos.
Conservación
Puedes conservar la focaccia dentro de una bolsa de papel durante un par de días.
