Un postre delicioso y sin grasas añadidas, la tarta de ricotta sin harina es una de las cosas más sencillas que he preparado, pero tan buena que se deshace en la boca, como también la copa de ricotta y chocolate. Bastan realmente poquísimos ingredientes, simples, genuinos y nuestra tarta está lista. Gusta mucho incluso a los más pequeños gracias a las muchas gotas de chocolate que la hacen realmente irresistible. Yo la he preparado con ricotta fresca, no envasada, pero podéis optar también por esta última, eliminando el agua que generalmente hay en el envase. Cremosa, deliciosa y aromatizada con ron, la tarta de ricotta sin harina debe prepararse el día anterior porque el reposo es casi indispensable para hacerla especial.
OTROS POSTRES CON RICOTTA
Tarta cremosa con pavesini y ricotta
- Dificultad: Muy fácil
- Costo: Económico
- Tiempo de preparación: 10 Minutos
- Porciones: 6 personas
- Métodos de Cocción: Horno
- Cocina: Italiana
Ingredientes para la preparación de la tarta de ricotta sin harina
- 600 g ricotta fresca de vaca
- 200 g Azúcar
- 4 huevos grandes
- 1 pizca Sal
- 150 g Gotas de chocolate negro
Herramientas
- Batidora eléctrica
- Cuenco
- Molde para tarta 24/26 de diámetro
- Horno
Preparación de la tarta de ricotta sin harina
Si tenemos ricotta demasiado blanda, dejemos escurrir un poco los líquidos. Mientras tanto, separamos las yemas de las claras de los huevos y trabajamos estas últimas con la mitad del azúcar. Con el azúcar restante, montamos las yemas hasta obtener una mezcla espumosa y casi blanca.
Añadimos a las yemas la ricotta y una pizca de sal y trabajamos nuevamente con las varillas eléctricas hasta tener una mezcla homogénea. Añadimos el ron (obviamente podemos usar también otros aromas como vainilla o cáscara de cítricos). Mezclamos delicadamente después de haber incorporado también las gotas de chocolate. Terminamos con las claras montadas a punto de nieve.
Enmantecamos y enharinamos un molde y vertemos la mezcla. Precalentamos el horno estático a 180°, horneamos y cocinamos unos 40-50 minutos. Dejamos enfriar y retiramos del molde. Mantenemos en el frigorífico hasta el momento de servir.
CONSERVACIÓN
Conserva la tarta en el frigorífico durante un par de días.
