Pasos para la preparación y cocción de las rosquillas saladas fritas:

• Primero cuece las patatas, te recomendamos cocerlas al vapor ya que de esta manera quedan más secas, cuécelas con la piel y luego, una vez cocidas, aplástalas en el pasapuré (no hace falta pelarlas ya que la piel se queda pegada en el pasapuré) y déjalas templar.

• En un bol pequeño pon la levadura de cerveza seca, añade 100 ml de agua tibia y mezcla bien para disolver la levadura.

  En un bol grande pon la harina tamizada, las patatas aplastadas, el aceite de oliva virgen extra y la levadura disuelta en el agua. Con una cuchara comienza a mezclar los ingredientes, cuando veas que empiezan a amalgamarse añade la sal (nosotros pusimos 2 cucharaditas) y el huevo.

  Trabaja ahora la mezcla con las manos y cuando esté homogénea, pásala a una tabla de amasar y trabájala bien, debe quedar lisa.

  Si ves que la mezcla queda demasiado densa, añade un poco de agua tibia, pero no te excedas con los líquidos, las patatas hervidas ya hacen la masa más suave con la fermentación.

  Ponla en un bol, cúbrela con film y deja que leve hasta duplicar su tamaño, aproximadamente 3 horas (también depende mucho de la temporada y del calor que haya en casa).

• Pasado el tiempo, espolvorea de harina la tabla de amasar, pon la masa y con un rodillo extiende una hoja de 1 centímetro de grosor y con un cortador de pasta en forma de rosquilla haz las rosquillas.

  Si no tienes el molde, puedes usar un cortador circular de 8 cm de diámetro y uno más pequeño para el agujero central.

  En una sartén grande pon el aceite para freír, cuando esté a temperatura, cuece las rosquillas saladas por ambos lados hasta que se doren.

• Una vez cocidas, colócalas sobre un plato con papel absorbente para que pierdan el exceso de grasa de la cocción, luego espolvoréalas con sal fina y ponlas en un plato listas para ser consumidas bien calientes o ligeramente templadas.