Pasos

• Verted la harina en forma de volcán sobre la superficie de trabajo. Cread un hueco en el centro y añadid los huevos.

  Comenzad a batir los huevos con un tenedor, y poco a poco empezad a incorporar la harina circundante.

  Cuando la masa comience a ser más consistente, empezad a amasar a mano, cada vez más enérgicamente hasta obtener un bollo liso y homogéneo. Envolvédlo en film transparente o cubridlo con un bol y dejadlo reposar durante unos 20-30 minutos.

  

• Verted la ricotta en un bol.

  Añadid la ralladura de lima y el pecorino rallado.

  

• Añadid luego el ron y la menta picada y mezclad todo para integrar los ingredientes.

  Transferid el relleno dentro de una manga pastelera y mantened en la nevera.

  

• Tomad la masa, estiradla con la máquina de pasta o con el rodillo hasta obtener un espesor no demasiado fino. Divididla en dos partes iguales.

  Colocad las hojas de menta sobre la primera lámina y cubrid posteriormente con la segunda lámina.

  

• Volved a pasar la lámina con las hojas de menta en la máquina de pasta hasta obtener un espesor bastante fino.

  Espolvoread el molde para raviolis con poca sémola y colocad la pasta encima de ellos.

  Rellenad con montoncitos de relleno no demasiado grandes.

  

• Cubrid ahora con la segunda lámina, sellad un poco los bordes, luego voltead y presionad el molde para raviolis.

  Levantad ahora el molde, que gracias a la sémola se levantará sin esfuerzo, y recortad vuestros raviolis mojito.

  

• Sumergid los raviolis en agua hirviendo con sal. Después de unos minutos, escurridlos y pasadlos a la sartén junto con la mantequilla derretida y las hojitas de menta.

  Servid calientes y disfrutad!